Los Blázquez (Córdoba), visto desde el imponente afloramiento rocoso de la Piedra Zuchá. Este bello pueblo, situado al noroeste de la sierra cordobesa, fue visitado por Gerda Taro a mediados de Mayo de 1937.
Tras algo más de dos años de investigación que
iniciamos en Julio de 2011, elrectanguloenlamano.blogspot.com ha podido hallar
la ubicación exacta en la que Gerda Taro hizo tres fotografías dentro del
pueblo de Los Blázquez.
Dichas imágenes aparecen en la página 201 del libro
de dos tomos La Maleta Mexicana editado por ICP/Steidl, que incluye 4.500 contactos
de 35 mm de fotografías realizadas por Fred Stein (en París en 1936)), así como Robert Capa, Gerda Taro y David Seymour ´Chim´ entre 1936 y 1939, durante la Guerra Civil Española en distintos frentes y ciudades, y cuyos negativos originales fueron revelados en París por Csiki Weisz.
Las tres fotografías objeto de este artículo, en las que aparece un joven soldado republicano sentado sobre una silla (con
otra silla desocupada visible a su lado) y equipado con mosquetón Mauser
calibre 7 x 57 mm (en cuya boca del cañón hay una flor probablemente introducida por Gerda Taro) y bayoneta larga específica de 40 cm con funda de cuero con extremos en metal sujeta al cinto mediante tahalí y abrazaderas
Photo: Gerda Taro. © ICP New York
Photo: Gerda Taro. © ICP New York
Photo: Gerda Taro. © ICP New York
Photo: Gerda Taro. © ICP New York
fueron hechas
dentro del pueblo de Los Blázquez, concretamente en la zona central de la calle
Fuentes, una de las más antiguas de la villa.
Zona central de la calle Fuentes de Los Blázquez hoy en día.
Gerda Taro acudió a Los Blázquez a finales de Mayo
de 1937 para fotografiar a las tropas de las Brigadas Internacionales
(específicamente el batallón Henri Vuillemin, perteneciente a la XIII Brigada Internacional y constituido mayormente por combatientes franceses y belgas) que pocas semanas antes, durante
la tarde del 5 de Abril de 1937, habían reconquistado el pueblo tras dura lucha
contra las tropas franquistas, como parte de un plan que incluyó también la
captura de Valsequillo (4 de Abril de 1937) y La Granjuela (5 de Abril de 1937
por la mañana), constituyéndose con estos tres pueblos un triángulo que sumado
a Fuenteobejuna habría de servir de plataforma para un ulterior ataque sobre
Peñarroya, en poder de las tropas franquistas, y que por su gran riqueza minera
era un objetivo prioritario para los altos mandos republicanos.
La lucha de tropas republicanas y franquistas por Los Blázquez fue tal desde Abril de 1937 hasta muy pocos meses antes del final de la guerra, que incluso todavía el 7 de Enero de 1939 el XXII Cuerpo de Ejército Republicano fue capaz de conquistar nuevamente Los Blázquez por asalto, tras dura lucha casa por casa con las fuerzas franquistas, aunque no consiguieron capturar Peñarroya, defendida muy tenazmente por las divisiones franquistas 60ª, 112ª y 122ª.
La lucha de tropas republicanas y franquistas por Los Blázquez fue tal desde Abril de 1937 hasta muy pocos meses antes del final de la guerra, que incluso todavía el 7 de Enero de 1939 el XXII Cuerpo de Ejército Republicano fue capaz de conquistar nuevamente Los Blázquez por asalto, tras dura lucha casa por casa con las fuerzas franquistas, aunque no consiguieron capturar Peñarroya, defendida muy tenazmente por las divisiones franquistas 60ª, 112ª y 122ª.
TRES FOTOGRAFÍAS INTERESANTES
Aunque las tres imágenes no reflejan acción, ya que
en esos momentos no había combates ni en Los Blázquez ni en sus inmediaciones,
las imágenes son altamente informativas, ya que captan claramente cual era la
situación del pueblo en esos momentos, completamente ocupado por tropas
republicanas y brigadas internacionales.
Sobre todo la fotografía en la que se aprecia buena parte de la zona central de la calle Fuentes, es muy significativa,
Photo: Gerda Taro. © ICP New York
ya que en ella vemos al soldado republicano que aparece sentado sobre la silla, mientras que en la mitad superior izquierda de la foto hay tres mujeres (una de las cuales lleva un niño en brazos) de pie, un niño también de pie de unos séis años y pantalón corto oscuro.
Asimismo, vamos a un soldado republicano con gorro isabelino dotado con borla (visible justo detrás del niño con indumentaria clara que es sujetado en brazos por su madre que lleva vestido negro), un soldado republicano con mono oscuro que camina de espaldas a la cámara en dirección al fondo de la calle y a una anciana vestida de negro que lleva en su mano izquierda una cesta de mimbre.
Destaca también en la imagen la presencia de un oficial republicano con gorra de plato, que aparece muy cerca del borde superior izquierdo del fotograma, camina por mitad de la calle, y se cruza con la anciana de vestido negro, avanzando con dirección ligeramente a la izquierda de la posición en la que se encuentra Gerda Taro con su Leica III y objetivo Leitz Summar 5 cm f/2.
Por otra parte, es también relevante la imagen en la que aparece el mismo soldado republicano sentado en la silla y a su derecha una mujer joven que sostiene a su bebé envuelto en una manta mientras un niño de unos cuatro años (probablemente su hijo mayor) aparece con un aro metálico que tiene asido alrededor de su cadera, ya que pese al carácter estático y carente de movimiento o acción de esta fotografía, el contexto bélico está muy latente mediante la contraposición de la madre con sendos vástagos y el soldado sentado en la silla, armado con un mosquetón Mauser calibre 7 x 57 mm y una bayoneta larga de casi 40 cm provista de hoja de acero con superficie acanalada en cada una de sus caras, que es capaz de provocar terribles heridas en los combates cuerpo a cuerpo.
Taro, mujer de notable sensibilidad y perspicacia, lo percibe e introduce la flor en el arma como mensaje de paz (al igual que Capa, odiaba la guerra) anticipándose en varias décadas al simbolismo conceptual de famosas fotografías como Young Girl with Flower de Mark Riboud (captando a la estudiante de diecisiete años Jan Rose Kasmir mostrando una margarita a soldados que intentan parar una manifestación con fusiles con bayonetas caladas) o a la también famosa Flower Power (realizada por Bernie Boston, fotógrafo del Washington Star, al actor de dieciocho años George Harris de Nueva York introduciendo flores en la boca de fusiles de asalto de policías militares antidisturbios) hechas en 1967 en Washington durante las protestas contra la Guerra de Vietnam.
Así pues, la fotoperiodista fotografía la atmósfera reinante en Los Blázquez, donde conviven con toda la cotidianeidad posible, dadas las circunstancias, las tropas republicanas y la población civil, siempre teniendo muy presente que esta villa estuvo durante mucho tiempo, de manera ininterrumpida, muy próxima al frente de combates de la zona entre el 5 de Abril de 1937 (fecha de la captura del pueblo por el batallón Henri Vuillemin) y el 26 de Enero de 1939 (cuando la 74ª División franquista capturó definitivamente Los Blázquez) y que el propio pueblo fue escenario de algunos cruentos combates durante un período de casi dos años consecutivos.
Sobre todo la fotografía en la que se aprecia buena parte de la zona central de la calle Fuentes, es muy significativa,
Photo: Gerda Taro. © ICP New York
ya que en ella vemos al soldado republicano que aparece sentado sobre la silla, mientras que en la mitad superior izquierda de la foto hay tres mujeres (una de las cuales lleva un niño en brazos) de pie, un niño también de pie de unos séis años y pantalón corto oscuro.
Asimismo, vamos a un soldado republicano con gorro isabelino dotado con borla (visible justo detrás del niño con indumentaria clara que es sujetado en brazos por su madre que lleva vestido negro), un soldado republicano con mono oscuro que camina de espaldas a la cámara en dirección al fondo de la calle y a una anciana vestida de negro que lleva en su mano izquierda una cesta de mimbre.
Destaca también en la imagen la presencia de un oficial republicano con gorra de plato, que aparece muy cerca del borde superior izquierdo del fotograma, camina por mitad de la calle, y se cruza con la anciana de vestido negro, avanzando con dirección ligeramente a la izquierda de la posición en la que se encuentra Gerda Taro con su Leica III y objetivo Leitz Summar 5 cm f/2.
Por otra parte, es también relevante la imagen en la que aparece el mismo soldado republicano sentado en la silla y a su derecha una mujer joven que sostiene a su bebé envuelto en una manta mientras un niño de unos cuatro años (probablemente su hijo mayor) aparece con un aro metálico que tiene asido alrededor de su cadera, ya que pese al carácter estático y carente de movimiento o acción de esta fotografía, el contexto bélico está muy latente mediante la contraposición de la madre con sendos vástagos y el soldado sentado en la silla, armado con un mosquetón Mauser calibre 7 x 57 mm y una bayoneta larga de casi 40 cm provista de hoja de acero con superficie acanalada en cada una de sus caras, que es capaz de provocar terribles heridas en los combates cuerpo a cuerpo.
Taro, mujer de notable sensibilidad y perspicacia, lo percibe e introduce la flor en el arma como mensaje de paz (al igual que Capa, odiaba la guerra) anticipándose en varias décadas al simbolismo conceptual de famosas fotografías como Young Girl with Flower de Mark Riboud (captando a la estudiante de diecisiete años Jan Rose Kasmir mostrando una margarita a soldados que intentan parar una manifestación con fusiles con bayonetas caladas) o a la también famosa Flower Power (realizada por Bernie Boston, fotógrafo del Washington Star, al actor de dieciocho años George Harris de Nueva York introduciendo flores en la boca de fusiles de asalto de policías militares antidisturbios) hechas en 1967 en Washington durante las protestas contra la Guerra de Vietnam.
Así pues, la fotoperiodista fotografía la atmósfera reinante en Los Blázquez, donde conviven con toda la cotidianeidad posible, dadas las circunstancias, las tropas republicanas y la población civil, siempre teniendo muy presente que esta villa estuvo durante mucho tiempo, de manera ininterrumpida, muy próxima al frente de combates de la zona entre el 5 de Abril de 1937 (fecha de la captura del pueblo por el batallón Henri Vuillemin) y el 26 de Enero de 1939 (cuando la 74ª División franquista capturó definitivamente Los Blázquez) y que el propio pueblo fue escenario de algunos cruentos combates durante un período de casi dos años consecutivos.
Por tal motivo, Los Blázquez fue muy dañado durante
la Guerra Civil Española y el pueblo tuvo que ser notablemente reconstruido en
el marco del Programa de Regiones Devastadas que se aplicó tras la finalización
del conflicto y que duró hasta 1957, por lo que se produjeron algunas inevitables modificaciones en
el trazado de sus calles, sobre todo estrechando las aceras (que durante los años treinta eran mucho más anchas, ya que el tráfico
rodado de automóviles particulares a motor era por entonces prácticamente
inexistente).
CÁMARA Y OBJETIVO UTILIZADOS
Gerda Taro utilizó una Leica III con objetivo Leitz Summar 5 cm f/2 de 6 elementos en 4 grupos, sin parasol y cuyo elemento frontal presentaba algunas marcas de limpieza.
Gerda Taro utilizó una Leica III con objetivo Leitz Summar 5 cm f/2 de 6 elementos en 4 grupos, sin parasol y cuyo elemento frontal presentaba algunas marcas de limpieza.
Han transcurrido setenta y séis años desde que la fotoperiodista alemana de origen judío Gerda Taro estuvo haciendo fotografías en el pueblo de Los Blázquez y sus inmediaciones.
Hoy en día, Los Blázquez, situado 97 km al norte de Córdoba capital, posee una población de aproximadamente 800 habitantes, cuya economía se basa mayormente en la agricultura y ganadería, sin olvidar la producción de aceites de gran nivel como el elaborado por la cooperativa olivarera artesanal Las Cinco Villas (nacida de la fusión de las cooperativas de Valsequillo y Los Blázquez y basada en la soberbia variedad picual de aceituna producida por el olivo Olea Europeae como producto base para su transformación en uno de los mejores aceites de oliva virgen del mundo, caracterizado por su impresionante estabilidad, rendimiento graso que supera con frecuencia el 25%, y óptima cantidad de antioxidantes naturales).
Por otra parte, destacan también los abundantes paisajes que enmarcan con gran belleza a este municipio cordobés situado entre Los Pedroches y el Alto Guadiato.
Por otra parte, destacan también los abundantes paisajes que enmarcan con gran belleza a este municipio cordobés situado entre Los Pedroches y el Alto Guadiato.
E incluso a veces, cuando llega el anochecer,
Los Blázquez visto desde la Piedra de Zuchá, diez minutos antes de caer la noche.
la emoción puede alcanzar inefables cotas imaginando a Gerda Taro haciendo fotos en Los Blázquez y sus alrededores hace ya tres generaciones, dos meses antes de su muerte aplastada por un tanque T-24B a las afueras norte de Villanueva de la Cañada el 25 de Julio de 1937, durante la última jornada de la Batalla de Brunete.
Y a las 4 de la madrugada, cuando reina el silencio en Los Blázquez, 76 años después, las sensaciones son ciertamente indescriptibles.
Copyright Texto y Fotos Indicadas: José Manuel Serrano Esparza