sábado, 5 de febrero de 2011

LEICA: RESULTADOS ECONÓMICOS EXCELENTES E HISTÓRICOS

Texto y Fotos: José Manuel Serrano Esparza. LHSA
ENGLISH VERSION

Leica ha hecho públicos los resultados de su tercer trimestre del año fiscal 2010-2011 (es decir, los beneficios obtenidos durante los nueve meses transcurridos entre el 1 de Abril de 2010 y el 31 de Diciembre de 2010, ya que el año fiscal en Alemania finaliza el 31 de Marzo de cada temporada) que arrojan cifras históricas, con unas ventas de 186.4 millones de euros, que suponen un incremento del 73% en relación con los 107.6 millones de euros correspondientes al mismo período del tercer trimestre del 2009-2010, lo cual supera con creces las mejores expectativas, ya que a diferencia del año fiscal anterior en el que Leica acumuló unas pérdidas de 0.3 millones de euros, acaba de obtener unos beneficios de 28.9 millones de euros.

Alfred Schopf, CEO of Leica Camera AG. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Ha tenido lugar una reestructuración integral en los departamentos de marketing, servicio al cliente y ventas, sectores que son ya totalmente administrados por Leica y su cadena internacional de distribuidores, habiéndose puesto especial énfasis en la importancia del apoyo fiable y continuado al usuario, al tiempo que se ha potenciado progresivamente la presentación de productos a entusiastas y profesionales que utilizan artículos de la marca, mediante la apertura de nuevos Leica Stores en Moscú (26 de Mayo de 2009, en Leninskiy Prospect, 61/1), Londres (10 de Septiembre de 2009, en Bruton Place, Mayfair, entre Old Bond Street y Berkeley Square, London W1), París (22 de Octubre de 2009, en 150 rue de la Pompe), Tokio (23 de Octubre de 2009, en la quinta planta del ala sur del centro Tamagawa Takashimayashopping ), Varsovia (27 de Enero de 2010, en Al. Jerozolimskie 189, nivel +1), Hong Kong (dos de ellos, el 28 de Mayo de 2010, en Times Square Mall, Store 918A, 1 Matheson Street, Causeway Bay y en IFC Mall, Store 2026, 1 Harbour View Street, Central) y Sao Paulo (9 de Diciembre de 2010, en Shopping Cidade Jardim, Av. Magalhâes de Castro, 12.000).

Ello constituye un gran logro para la mítica empresa fotográfica alemana, ya que se trata del mejor rendimiento económico para un trimestre desde que en 1996 Leica GmbH se convirtió en Leica Camera AG y comenzó la oferta pública de venta de acciones con objetivos de expansión, iniciando su cotización en bolsa.

Regreso al Futuro: La Leica M9 telemétrica full frame digital ha supuesto la total consolidación de la empresa alemana en el segmento de la fotografía digital, con la virtud añadida de la preservación del clasicismo y perfil de líneas inherentes a las célebres cámaras telemétricas analógicas formato 35 mm de serie M y sobre todo de una forma de fotografiar vigente desde los tiempos de Oskar Barnack. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Leica M9 con objetivo Elmarit-M 28 mm f/2.8 ASPH junto a un pin original de la Photokina Köln 1956, que tuvo lugar dos años después del lanzamiento al mercado de la Leica M3. Aunque han transcurrido 56 años desde la introducción de la Leica M3 y 78 desde la aparición de la Leica II (Model D) 1932-1948 que fue la primera Leica en incorporar telémetro dentro del cuerpo de cámara, la actual Leica M9 comparte muchos rasgos comunes y metodología de trabajo con cámaras Leica telemétricas ampliamente utilizadas durante el siglo XX por Maestros de la Fotografía como Elliot Erwitt, Henri Cartier-Bresson, Horst Faas, Robert Capa, Ian Berry, Chim, Raymond Depardon, David Alan Harvey, Inge Morath, Constantin Manos, Bill Pierce, Tom Stoddart, Phillip Jones Griffith, etc. Pin cortesía de Dr. Mervin Stewart, que asistió a la Photokina Köln de 1956. Photo: José Manuel Serrano Esparza
Pero estos resultados económicos de Leica, recién hechos públicos y correspondientes al tercer trimestre del año 2010-2011, son especialmente relevantes, ya que no dimanan de una inyección puntual de cash flow de inversores privados, sino de las ventas sobre todo de tres productos de enorme calidad, dos de los cuales son con diferencia el referente mundial en su segmento: la Leica M9 telemétrica formato 24 x 36 mm (la cámara full frame mirrorless digital con ópticas intercambiables más compacta del mercado) y la Leica S2 réflex digital de formato medio, más un tercero: la compacta digital APS-C Leica X1, que aún con un AF un poco lento para personas en movimiento y no gozando de la posibilidad de acoplar ópticas intercambiables, posee una gran personalidad, un bellísimo diseño inspirado en mi opinión en la Leica "O" 1923-1924, la Leica 1 Model A 1925-1936 y la Compur Leica (Model B) 1926-1941 y sobre todo un objetivo fijo Elmarit 24 mm f/2.8 ASPH de 8 elementos en 6 grupos (uno de ellos asférico) equivalente a un 36 mm en paso universal, cuya calidad de imagen es simplemente soberbia, todo ello con el beneficio añadido de un peso (286 gramos) y volumen extremadamente reducidos, lo cual facilita notablemente su transporte, por lo que esta pequeña gran cámara cumple perfectamente las tareas fotográficas para las cuales fue creada.

Leica S2 de formato medio con el impresionante angular Summarit-S 35 mm f/2.5 ASPH (CS), equivalente a un 28 mm en paso universal. La calidad de imagen lograda por esta revolucionaria cámara de formato medio ligeramente más pequeña que una réflex digital profesional full frame, y capaz de conseguir excelentes resultados disparando a pulso en exteriores a velocidades de obturación de 1/500 s y superiores en una amplia gama de contextos fotográficos (los archivos DNG obtenidos tirando a ISO 320 e ISO 640 son asombrosos y los realizados a ISO 1250 muy buenos, y excepcionales sobre trípode en interiores en fotografía de estudio, comercial de productos, moda, etc, y en exteriores en fotografía de paisaje), es en mi opinión comparable desde el punto de vista del poder de resolución, nitidez y aspecto fílmico, a la alcanzada por ejemplo con cámaras analógicas de gran formato 8 x 10 (20 x 25 cm) Linhof, Ebony, etc, cuyos negativos son digitalizados con scanner profesional de tambor, si bien las cámaras de gran formato 8 x 10 son virtualmente imbatibles en belleza estética de imagen y rendimiento en las zonas fuera de foco, al margen de sus muchas posibilidades de basculamiento y muy superior capacidad para jugar con los planos de enfoque. Photo: José Manuel Serrano Esparza

David Farkas disparando a pulso con Leica S2 y objetivo Summarit-S 35 mm f/2.5 ASPH (CS) desde la cubierta de un barco durante un pequeño crucero a través del río Mosela en Alemania. Las condiciones distaban bastante de ser las idóneas, con algo de oleaje que movía la embarcación, fuertes vientos y lluvia intermitente, pero el perfecto agarre en la mano del cuerpo de cámara ergonómicamente diseñado, la notable suavidad en la liberación del obturador y su funcionamiento con un mínimo retardo, el excelente amortiguamiento de su golpe de espejo, el sellado integral antipolvo y antilluvia y tiempo húmedo tanto en el cuerpo de la S2 como en sus ópticas, el muy preciso AF y la disponibilidad de sensibilidades entre ISO 160 y 1250 (con excepcional calidad y profundidad de imagen a tres sensibilidades: ISO 160, 320 y 640 inclusive con la fácil posibilidad de usar ISO 320 e ISO 640 en combinación con velocidades de obturación de 1/500 seg y superiores para realizar fotografías a pulso en trabajos en exteriores, minimizando en gran medida la vibración y evitando los enfoques originados por movimiento- y muy buena a ISO 1250), permitieron a la S2 obtener unos espléndidos resultados. Photo: José Manuel Serrano Esparza

La cámara de formato medio Leica S2 y su gama de objetivos del S-System son capaces de sacar adelante sin ningún problema tareas fotográficas bajo las condiciones atmosféricas más duras. Aquí, tanto la cámara como el objetivo Summarit-S 35 mm f/2.5 ASPH (CS) funcionaron de manera impecable en manos de David Farkas a pesar de la lluvia. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Pero a diferencia de las cámaras de gran formato 8 x 10 (contactos de 20 x 25 cm), con la Leica S2 se puede trabajar a pulso en una gama muy amplia de trabajos fotográficos, de modo similar a las cçamaras profesionales full frame de 35 mm, sin necesidad de trípode o monopie.

Unicamente la excelente cámara telemétrica analógica de gran formato y objetivo fijo Littman 4 x 5 (10 x 12 cm) en sus distintas configuraciones ópticas posibles (Rodenstock Ysarex 127 mm f/4.7, Xenotar 135 mm f/3.5, Xenar 150 mm f/4.5, Rodenstock Apo Sironar 135 y Apo Symmar 120 y 150) es capaz de obtener disparando a pulso una calidad de gran formato que se aproxime a la lograda con la Leica S2 en lo que respecta a poder de resolución, nitidez y contraste (el bokeh de la Littman -factor subjetivo- , especialmente con el clásico objetivo Xenotar fotoperiodístico, será superior al excelente rendimiento óptico de las zonas fuera de foco estéticamente próximo a las cámaras analógicas con contactos 10 x 12 cm y 20 x 25 cm que consigue la Leica S2, que exhibe también la sutil tonalidad en las altas luces especialmente inherente a las emulsiones químicas de gran formato), siempre y cuando se utilice película 4 x 5 de baja sensibilidad y se lleve a cabo un escaneo profesional de los negativos.

No obstante, la Leica S2 es mucho más versátil, con una amplia gama de objetivos intercambiables que son hoy por hoy la referencia cualitativa óptica y mecánica, junto con probablemente el AF más preciso jamás fabricado, no tan tremendamente rápido como el de las mejores reflex high end profesionales de Canon, Nikon o la Olympus E-5, pero desde luego, es muy rápido y sobre todo de una asombrosa exactitud.

Y éste ha sido otro factor clave del gran éxito de ventas de la S2, ya que aunque los objetivos del S-System disponibles consiguen una calidad de imagen incontestable a las máximas aperturas f/2.8 y f/3.5, debido al gran tamaño del sensor de formato medio, la profundidad de campo, sobre todo a f/2.5, es muy reducida, por lo que Leica incrementó aún más la velocidad de AF (que era ya la más alta entre las cámaras de formato medio), manteniendo idéntica precisión, con la introducción del firmware 1.0.0.16, que ha sido actualizado recientemente con la más moderna versión de firmware para la Leica S2: el FW 1.0.0.24 que aumenta la precisión AF todavía más y mejora el enfoque sobre detalles muy pequeños de la imagen, aportando asimismo una amplia gama de importantes mejoras, siendo especialmente relevante la posibilidad de compresión DNG sin pérdidas reduciendo los tamaños de archivo de 75MB a aproximadamente 40MB y aumentando la capacidad de disparo en ráfaga hasta las 14 exposiciones consecutivas (1.5 frames/segundo), un nuevo tiempo de exposición máximo, la opción de aviso electrónico de niveles de luces y sombras, modo de obturación en posición B, y ulterior perfeccionamiento del display del histograma, compatibilidad de tarjetas de memoria, opción de botón de memoria y legibilidad del display.


Jim Lager (máxima autoridad mundial en cámaras, objetivos y accesorios Leica) evaluando con David Farkas los resultados obtenidos con la S2 y objetivo Elmarit-S 35 mm f/2.5 ASPH (CS). Photo: José Manuel Serrano Esparza

Vista lateral de la cámara Leica S2 de formato medio con Summarit-S 35 mm f/2.5 ASPH (CS) de 11 elementos en 9 grupos (con dos superficies asféricas y cinco vidrios ópticos especiales con dispersión parcial anómala, además de incluir un grupo trasero de enfoque que asegura una muy alta calidad de imagen a todas las distancias de enfoque, desde la más próxima de 55 cm hasta infinito) y equivalente a un angular de 28 mm en formato 24 x 36 mm. Este extraordinario objetivo consigue unos impresionantes niveles de reproducción de detalles y contraste a través de todo el campo de imagen (tanto en el centro como en los bordes) inherentes a las ópticas del S-System, desconocidos hasta ahora en el entorno de la fotografía digital de formato medio y más propios de las cámaras de gran formato 8 x 10 (20 x 25 cm) con película de baja sensibilidad. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Tanto las curvas MTF pertenecientes a este extraordinario angular como las fotografías hechas hasta ahora por diferentes fotógrafos profesionales, han demostrado que Peter Karbe (Jefe del Departamento Óptico de Leica Camera AG en Solms y considerado actualmente el mejor diseñador óptico del mundo) ha conseguido algo que se consideraba prácticamente imposible: un angular réflex de formato medio equivalente a un objetivo de 28 mm para cámaras con captor 24 x 26 mm y tanto óptica como mecánicamente más perfecto todavía que el Summicron-M 28 mm f/2 ASPH de 9 elementos en 6 grupos, diseñado por Michael Heiden y que era hasta ahora con diferencia el patrón cualitativo en esta focal.


Por otra parte, el visor óptico de la Leica S2 es extraordinario, muy brillante y con excelente contraste, con cobertura del 97% e incluso supera en mi opinión en calidad de visionado y comodidad de uso a los soberbios visores ópticos de las cámaras réflex analógicas de enfoque manual Olympus OM-1, Leica R8 y Leica R9 de 35 mm y Pentax 645 de formato medio, que eran en mi opinión los referentes mundiales en visores de cámaras fotográficas réflex hasta la llegada de la Leica S2. Además, el ocular es enorme, por lo que el fotógrafo puede ver fácilmente toda la pantalla con gafas puestas, y el grueso aro engomado para acomodar la cuenca del ojo está rodeado por un anillo moleteado que permite un ajuste de dioptrías.

A destacar también la gran pantalla LCD de 3 pulgadas, con un display de 460.000 pixels y color de 16 bits (que hace que tanto la composición como la confirmación de enfoque sean más fáciles que en la mayoría de cámaras digitales slr, permitiendo a los fotógrafos contemplar las imágenes y datos desde amplios ángulos de visión), que constituye un importante plus añadido. Photo: José Manuel Serrano Esparza


Dos diferentes filosofías y estilos de fotografiar que coexisten en pleno siglo XXI: John Patterson (Miembro de la Junta Directiva de la LHSA y fotógrafo especializado en Sistema M con muchas décadas de experiencia) con Leica M9 full frame y Apo-Summicron-M 90 mm f/2 ASPH y David Farkas con réflex de formato medio digital Leica S2 y objetivo Apo-Elmar-S 180 mm f/3.5 ASPH (CS). Photo: José Manuel Serrano Esparza

Además, Leica ha conseguido reducir a cero la desviación de enfoque (focusing shift, también denominado blendendifferenz) al diafragmar, mediante la introducción de excelentes elementos flotantes y un sistema muy especial de corrección de diafragma que tiene en cuenta la distancia de enfoque y está basado en intervalos muy pequeños de enfoque en las distancias que se aproximan a infinito en las que la profundidad de campo disminuye. Este sistema de autoenfoque de gran fiabilidad, muy rápido y extraordinariamente preciso de la Leica S2, depende sobre todo de las aperturas utilizadas, ya que los objetivos del Sistema S están perfectamente calibrados para dicha exactitud de AF como parte de un sistema integrado.

Pero existe todavía un aspecto más que muestra diáfanamente la búsqueda meticulosa tanto de la máxima perfección óptica y de imagen por parte de Leica con la S2: la presencia de un filtro IR integrado en el sensor Kodak KAF-37500 en forma de cubierta de cristal, justo delante del CCD, y que constituye parte de la fórmula óptica de cada objetivo del S-System, ya que Leica diseñó cada objetivo para la S2 en sinergia con el filtro IR como parte de la trayectoria óptica, lo cual origina un desplazamiento de los rayos de luz, evitando así tanto las típicas aberraciones esféricas creadas por los respaldos de formato medio que utilizan objetivos creados para uso con emulsiones químicas como la necesidad de aplicar software para corregirlas (lo cual produce transiciones muy abruptas entre las zonas enfocadas y desenfocadas), de tal manera que la S2 consigue no sólo unos excepcionales niveles de poder de resolución, nitidez y contraste, sino también espléndidos resultados en la plasmación de las áreas fuera de foco.

Obviamente, desde el punto de vista de la belleza estética de imagen, el bokeh logrado por la Leica S2 no alcanza el nivel de la élite histórica de objetivos de gran formato referenciales en esta faceta como el Kodak Aero-Ektar 178 mm f/2.5, el Pinkham & Smith Serie IV f/4.5 Visual Quality con configuración de doblete (cuya representación de las zonas desenfocadas se halla a medio camino entre la extrema suavidad del Semi-Acromático y la muy precisa nitidez de los objetivos con elevados niveles de corrección óptica), el Voigtländer Euriscop Series II, el Wollensak Velostigmat Serie II de 12 pulgadas f/4.5 de tres elementos, con barrilete de latón y doblete (con ambos elementos adheridos) ubicado tras el diafragma, el Taylor-Hobson Portrait Series II E Anastigmat 10.5" f/4.5, el Bausch & Lomb Unar 14" f/4.5, el Dallmeyer 4A Petzval 18" f/4, el Cooke Portrait PS945 229 mm f/4.5, el Bausch & Lomb de 15 pulgadas f/4.5 de proyección con diseño triplete perfil Petzval linterna mágica, el Pinkham & Smith 14" f/4.5 Bi-Quality o el Leitz Thambar 90 mm f/2.2 para cámaras clásicas mirrorless Leica LTM de 35 mm, etc.

Pero de cualquier modo, el bokeh obtenido por la Leica S2 con sus objetivos S-System es soberbio, a mi entender similar a la delicada suavidad de definición en las zonas desenfocadas lograda por el objetivo de gran formato Goerz Portrait Hypar f/3.5-4.5 (una óptica de gran luminosidad, muy bien corregida, creada para trabajar a máxima abertura de diafragma y libre de reflejos internos) en lo tocante a belleza estética y transición progresiva entre los planos de imagen enfocados y desenfocados, fusionando los perfiles y gradaciones tonales.

Si tenemos en cuenta que por muy bueno que pueda ser un sistema óptico, cada objetivo es siempre en mayor o menor medida un compromiso que engloba muchas variables diferentes (incluso en el caso del S-System, que son los más perfectos óptica y mecánicamente creados hasta la fecha en cualquier formato) y que los objetivos S para la Leica S2 obtienen incontestables niveles de poder de resolución, nitidez y contraste, así como ausencia de aberraciones, distorsión y viñeteado sobre toda la superficie de imagen, desde centro a bordes y esquinas, sumar a estas cualidades un excelente bokeh con estética de imagen similar a la de objetivos de gran formato es una proeza óptica, porque es mucho más difícil obtener un gran rendimiento en las zonas desenfocadas con objetivos de corrección óptica sin precedentes (dotados de superficies asféricas, modernos multirrevestimientos y que además son muy resistentes a los reflejos) y que mantienen prácticamente idéntica calidad de imagen ya sea a máxima apertura f/2.5 o f/3.5 que a f/8, que conseguirlo con algunos objetivos de gran formato de merecida fama, cuyo diseño óptico fue optimizado para conseguir fantásticos bokehs mediante un grado intencionado de corrección de las aberraciones en el objetivo y en la forma del iris del obturador, con un significativo declive de rendimiento óptico en bordes y esquinas, especialmente a diafragma abierto y a las aberturas medias.

Por tanto, los objetivos de gran luminosidad del S-System combinan un insólito rendimiento óptico y mecánico a todos los diafragmas y distancias de enfoque en cuanto a poder de resolución, nitidez y contraste sobre todo el área del fotograma, pero a la vez consiguen a f/2.5, f/3.5 y f/4 un bokeh en mi opinión más propio del gran formato, por lo que desde un punto de vista histórico, las ópticas del S-System han abierto sin ningún género de dudas una nueva era en el ámbito del formato medio, del mismo modo que los extraordinarios objetivos ingleses de gran formato, excelente corrección óptica y muy alta luminosidad Taylor & Hobson Anastigmat Series 0 Opic f/2 - con cada elemento óptico formado por una sección simple y una doble separadas mediante un espacio de aire- y Taylor & Hobson Series X Speedic f/2 - derivado del esquema Cooke original, pero con el elemento trasero dividido en dos superficies de vidrio óptico, y una célula de aire con forma negativa ubicada entre ellos- (los negativos obtenidos por ambos objetivos de latón son de una brillantez muy homogénea, con una nitidez de amplia cobertura y permiten realizar grandes ampliaciones sobre papel fotográfico sin pérdida de calidad) significaron a comienzos de los años treinta un salto cuántico con respecto a la calidad y luminosidad de las ópticas de gran formato, y eran capaces de obtener tanto imágenes de gran nitidez y nivel de detalle en las zonas enfocadas, como un excelente bokeh en las zonas desenfocadas haciendo fotografías con los diafragmas más abiertos.

Zona superior de Leica S2 con objetivo Summarit-S 70 mm f/2.5 ASPH (CS).

Aunque la Leica S2 es una excelente y sorprendentemente versátil herramienta para la fotografía profesional a pulso de formato medio en exteriores, pudiendo afrontar con éxito muy diferentes géneros fotográficos, dotada con ópticas muy luminosas, una velocidad máxima de obturador de 1/4000 s, un sellado que la protege enormemente bajo las condiciones climáticas más extremas, la impresionante calidad de imagen a plena abertura, los resultados plenamente profesionales entre ISO 160 y 1250 a todas las distancias de enfoque incluyendo las más cortas, etc, lógicamente (con la ayuda del gran y muy brillante visor de pentaprisma) el máximo potencial cualitativo de esta cámara de formato medio réflex digital será obtenido mediante enfoque manual, un trípode (la base de la S2 lleva tanto rosca 3/8" como 1/4") y un fotógrafo que se tome su tiempo supervisando cada aspecto relacionado con la creación de imagen (pudiendo beneficiarse además del cable disparador Leica S, muy útil para reducir todo lo posible la vibración producida por la liberación del obturador y el espejo basculante), ya que la S2, además de ser una soberbia opción para la realización de ágil fotografía de formato medio a pulso en exteriores en una amplia gama de trabajos fotográficos y una gran cámara para fotografía de paisajes, constituye un auténtico pura sangre en fotografía de producto, bodas, estudio y moda (aunque no es menos cierto que esta cámara se convierte igualmente en una elección de primerísimo nivel para realizar fotografía de moda disparando a pulso en modo AF, buscando diferentes ángulos de toma con personajes principales, modelos, actores y actrices, etc, gracias a su notable ergonomía y a su gran precisión de autoenfoque, que permiten obtener archivos DNG de excepcional calidad mientras el fotógrafo se mueve con rapidez).

Probablemente, la alternativa más práctica de la S2 con respecto al uso de enfoque manual es sacar partido del botón de enfoque ubicado en la parte trasera de la cámara, lo cual permite un gran control, y utilizar además trípode y la función de cierre de espejo.


Evidentemente, la S2 se halla a considerable distancia de las capacidades de la Leica M9 telemétrica para la fotografía a pulso con luz ambiente y sobre todo en situaciones con bajas condiciones de luminosidad, ya que las Leicas M son mucho más pequeñas, su peso es considerablemente inferior y carecen de espejo basculante, lo cual unido al volumen notablemente miniaturizado y peso muy liviano de las ópticas M, permiten disparar a pulso sin trepidación a velocidades mucho más bajas que la S2, con un significativamente mayor margen de seguridad.
Más de 50 años de fidelidad al Sistema Leica M. Dr. Mervin Stewart fotografiando a pulso con cámara Leica M9 y objetivo Summicron-M 35 mm f/2 ASPH. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Al igual que la Leica S2, la Leica M9 (junto con las cámaras analógicas M7, MP y distintas variedades de la M6) es una obra maestra, pero con una historia muy diferente, ya que mientras la S2 es producto de la genialidad e ímprobo trabajo de un gran equipo Leica de expertos de talla mundial en distintos ámbitos tecnológicos que desarrollaron su actividad durante los aproximadamente cuatro años del Proyecto Afrika - probablemente el más importante hasta la fecha en el marco de la fotografía digital- (que comenzó a finales de 2006 y tuvo como resultado la presentación en Septiembre de 2009 de la que es en la actualidad la cámara digital reflex de formato medio de referencia así como sus ópticas), la M9 es el más reciente eslabón evolutivo producto de sucesivas mejoras realizadas durante casi 80 años en cámaras Leica telemétricas por parte de muchos de los mejores técnicos fotográficos, ingenieros y diseñadores ópticos de la historia en las fábricas Leitz de Wetzlar (Alemania), Midland (Ontario, Canadá) y Leica Camera AG en Solms (Alemania) y además, la M9 se impone con rotundidad en fotografía de reportaje, siendo también en mi opinión la mejor cámara digital existente para fotografía de viajes y streeter.

Por tanto, la transición integral analógico-digital representada por la M9 no ha significado la ruptura con los principios básicos y filosofía del sistema Leica M durante toda su historia, sino la total confirmación de sus principales valores y la continuación de tan prestigiosa saga.

La Leica M9 es también una excelente herramienta fotográfica en el ámbito del fotoperiodismo con su prácticamente inexistente retardo entre el momento en el que presionamos el botón disparador y la captura real de la imagen por el sensor full frame, sin olvidar su gran discreción de funcionamiento, ya que el muy bajo nivel de ruido producido por su obturador permite fotografiar con gran rapidez y de manera muy silenciosa, algo virtualmente imposible de llevar a cabo con las cámaras réflex full frame profesionales, debido a sus mucho mayores dimensiones y pesos y al ruido bastante más perceptible que producen durante la liberación del obturador, por efecto del movimiento del espejo basculante.

Por otra parte, aunque las impresionantes ópticas del S-System para la Leica S2 son los objetivos fotográficos más perfectos jamás construídos, y logran un nivel de detalle desconocido hasta la fecha fuera del ámbito del gran formato analógico, así como una increíble uniformidad de rendimiento óptico, incluso a plena abertura, tanto en el centro como en los bordes del fotograma, batiendo ligeramente a la flor y nata de las ópticas Leica M no retrofoco ( Summilux-M 50 mm f/1.4 ASPH, Summicron-M 28 mm f/2 ASPH, Summicron-M 75 mm f/2 ASPH, Apo-Summicron-M 90 mm f/2 ASPH, Elmar-M 24 mm f/3.8 ASPH, etc), y pese a que la S2 es una gran herramienta fotográfica para la creación de imágenes en exteriores, permitiendo disparar a pulso con facilidad desde un helicóptero con velocidades de obturación en torno a 1/1500 seg a f/2.5 y f/4 (por lo que sería posible hacer fotografías desde el interior de la aeronave a 1/500 seg, 1/750 y 1/1000, obteniendo mayor profundidad de campo) logrando resultados con muy buena precisión de enfoque y nitidez (tal y como ha demostrado Nick Rain, fotógrafo profesional australiano y editor de la revista de 116 páginas Better Digital Camera), es importante tener en cuenta que las cámaras y objetivos Leica M necesitan menos luz para funcionar, siendo además un prodigio de miniaturización, y que la Leica M9 es en la actualidad la cámara full format mirrorless con ópticas intercambiables más compacta del mercado así como la que obtiene los archivos RAW más puros (seguida de cerca en esta faceta por las soberbias Nikon D3 y D700) del entorno de cámaras con tamaño de sensor 24 x 36 mm y constituye una herramienta fotográfica mucho más optimizada que la S2 para la fotografía tirando a pulso, tanto con luz ambiente como especialmente en bajas condiciones de luminosidad.
Summilux-M 35 mm f/1.4 ASPH New Version. Lleva 9 elementos en 5 grupos e incorpora un elemento flotante que le permite obtener un espléndido rendimiento óptico también en las distancias de enfoque más próximas. Obtiene una extraordinaria calidad de imagen sobre todo el rango de enfoque, desde 0.7 m hasta infinito, con gran nitidez y contraste, así como una soberbia captación de detalles a través de todo el campo de imagen, junto con una asombrosa ausencia de aberraciones, incluyendo unos niveles de coma prácticamente inapreciables.

Esquema óptico del Summilux-M 35 mm f/1.4 ASPH New Version. Es un objetivo muy compacto, con una longitud de 4,6 cm, un diámetro máximo de 5,6 mm y un peso muy ligero de 320 g.

Los objetivos Leica M son extraordinarios no sólo porque en un elevado porcentaje de diferentes longitudes focales y altas luminosidades son los mejores del mercado tanto en rendimiento óptico como mecánico, sino también porque son los más pequeños y ligeros existentes para cámaras full frame 24 x 36 mm, y son construídos con el diámetro de lente frontal lo más reducido posible (en mi opinión, desde una perspectiva histórica, únicamente las legendarias ópticas con preselección de diafragma Kern Macro Switar 26 mm f/1.1 RX (1968), Switar 10 mm f/1.6 RX (1968), Macro Switar 50 mm f/1.4 RX (1964), y Kern Macro-Switar 75 mm f/1.9 (1970) para cámaras cinematográficas profesionales reflex Bolex H-16 de 16 mm han seguido parámetros similares a los de los objetivos Leica M formato 35 mm con respecto a la obtención de las máximas aberturas de diaframa, calidades ópticas y excelencia mecánica posibles, armonizadas con los tamaños y pesos más ligeros científicamente viables).


Summilux-M 50 mm f/1.4 ASPH.

Esquema óptico y mecánico del Summilux-M 50 mm f/1.4 ASPH, constituido por 8 elementos en 5 grupos. El elemento 4 es una superficie asférica, el 2 un vidrio óptico de fluorita, los elementos 1, 6 y 7 están hechos con un vidrio óptico de muy alto índice de refracción a fin de minimizar las aberraciones monocromáticas, y el elemento 3 está fabricado con un vidrio óptico especial que fue creado en el antiguo laboratorio Leitz. Incorpora un elemento flotante que mantiene un extraordinario nivel de rendimiento óptico, incluso en las distancias de enfoque más próximas hasta 0.7 m, para lo cual el componente óptico más trasero (elementos 7 y 8) se mueve en relación con el resto del sistema óptico. Este es el mejor objetivo standard jamás fabricado para cámaras full frame de 35 mm, y por mucho que se diafragme, apenas mejorará la calidad de imagen, obteniendo simplemente una mayor profundidad de campo. Es muy compacto, con una longitud de 5,2 cm, un diámetro máximo de 5,35 mm y un peso notablemente ligero de 335 g.

Ello incrementa de modo geométrico las dificultades de diseño de los objetivos Leica M (en especial los más modernos dotados de superficies asféricas), siempre en condiciones muy arduas y al límite de lo realizable en el estado del arte tecnológico utilizado por Leica.

Los admirables niveles de precisión buscados constantemente por Leica son imposibles de obtener de modo automático y requieren tremenda habilidad y experiencia, así como abundante cantidad de trabajo hecho a mano.

La curvatura de las lentes asféricas (que se caracterizan por sus radios locales de curvatura) ha de llevarse a cabo con la máxima precisión, puliendo los elementos asféricos por medio de mecanizado multiaxial, por lo que su fabricación es extremadamente difícil, siendo su última fase de bruñido el MRF.

Por tanto, los dos métodos actuales utilizados por Leica en la creación de superficies asféricas (uno aplicado en piezas talladas de vidrio óptico de aproximadamente 20 mm de diámetro, obtenidas mediante presión y sobre las que se efectúa el pulido hasta obtener las asfericidades deseadas) , y el otro con máquinas CNC que tallan y pulen con impresionante exactitud elementos asféricos con diámetros mayores) es muy sofisticado, con constantes pruebas y supervisión llevada a cabo mediante interferómetro y concentrando de distintos modos partículas magnéticas de pulimentación a través de campos magnéticos de diferente potencia en zonas del objetivo especificadas con precisión.
Summicron-M 28 mm f/2 ASPH. Incluye 9 elementos en 6 grupos y es muy compacto, con tan sólo 4,8 cm de longitud, un diámetro máximo de 5,3 cm y un peso muy ligero de 270 g. Su tratamiento antirreflejos es tan bueno que es posible hacer fotografías en contextos de fuerte contraluz.

Esquema óptico de Summicron-M 28 mm f/2 ASPH

Y aquí es donde el profundo conocimiento, experiencia, inventiva y los toques personales de los diseñadores ópticos e ingenieros de talla mundial de Leica brillan con luz propia, sin olvidar la labor llevada a cabo por expertos como el ingeniero André Horn y Mathias Bayer bien mediante el sistema blank-press para angulares (mediante presión realizada con gran exactitud sobre bloques de vidrio óptico, lo cual del modo en que lo hace Leica permite obtener superficies asféricas de geometría compleja con precisión de formas y calidades comparables a las que se obtendrían mediante tallado o pulido mecánico del más alto nivel, pero con un coste de producción mucho más asequible) o bien con máquinas CNC especiales de altísima precisión fabricadas por Leica para la elaboración de objetivos de focales medias y largas (teniendo lugar también un pulido y limpieza en inmersión de ultrasonidos) con frecuentes precisiones de hasta 1/1000 de milímetro durante el pulido preliminar y de hasta 3 / 60.000 de mm durante la fase final llevada a cabo por máquinas dotadas con cabezas oscilantes que realizan el definitivo bruñido de los elementos ópticos, tras lo cual se comprueba en todas las lentes asféricas, una por una, por medio de un interferómetro dotado de láser helio-neón, posibles desviaciones de rendimiento en bordes o astigmatismo.
Apo-Summicron-M 75 mm f/2 ASPH, un objetivo tele extremadamente compacto, muy luminoso y de impresionante rendimiento óptico a todas las aberturas de diafragma y distancias de enfoque. Su fórmula óptica incluye 7 elementos en 5 grupos, con una longitud de 6, 68 cm, un diámetro máximo de 5, 8 cm y un peso muy ligero de 430 g. Un excelente objetivo para retratos que aporta tanto una perspectiva natural como una plasticidad única, concentrándose más en el sujeto que una óptica standard de 50 mm y con cualidades como telefoto más sutiles que las de un 90 mm. logrando además una representación referencial de los valores tonales incluso de los más pequeños detalles.
Esquema óptico del Apo-Summicron-M 75 mm f/2 ASPH, que incluye una superficie asférica, vidrios ópticos con dispersión parcial anómala y alto índice de refracción, un elemento flotante que incorpora un mecanismo de ajuste de gran precisión, técnicas de recubrimiento que son el estado del arte actual en dicha faceta y un muy sofisticado tratamiento antirreflejos internos. Junto con el Summilux-M 50 mm f/1.4 ASPH, significa un nuevo tipo de diseño Doble-Gauss en el que los tres primeros elementos son ensamblados conforme a tal esquema clásico. Dos de los siete elementos están fabricados con vidrios ópticos de dispersión parcial anómala, a fin de evitar imprecisiones de color (uno de ellos lleva abundante fluorita y el otro -el tercer elemento que es en gran medida catalizador del extraordinario nivel de corrección óptica de este objetivo tele- tuvo su origen en el antiguo laboratorio Leitz de vidrios ópticos), y dos elementos más están hechos con vidrio óptico de alta refracción. Las aberraciones independientes del color son reducidas a niveles inapreciables gracias a la superficie asférica cóncava ubicada justo detrás del diafragma así como a los dos elementos de alto índice refractivo.

Aunar tamaño y peso muy pequeños con una excepcional calidad de imagen constituye el más prolijo reto óptico y mecánico a la hora de abordar el diseño de un objetivo.

Es cierto que sobre todo el programa COMO de corrección óptica creado por Helmutt Marx a finales de los años sesenta y desarrollado durante los ochenta y noventa por el Dr. Wolfgang Vollrath, Michael Heiden y Sigrun Kammans, al igual que el programa de análisis "01" de Horst Schröder continúan siendo hoy por hoy de gran ayuda para los diseñadores ópticos en Solms y son capaces de crear buenos objetivos seleccionando diferentes tipos de vidrios y muchas otras variables, pero la inmensa mayoría de veces, desde el mismo instante en que se pide ayuda al programa para obtener un rendimiento óptico y mecánico verdaderamente excepcional como es el caso de la mayoría de objetivos del Sistema Leica M, los softwares de diseño óptico, por buenos que puedan llegar a ser, producirán un objetivo de tamaño grande, y si se intentan reducir las dimensiones y peso intentando preservar a la vez las soberbias cualidades óptico-mecánicas, el rendimiento en dichas facetas bajará notablemente.

" Los ordenadores sólo pueden indicar posibles vías de diseño. Si una empresa óptica confía demasiado en los ordenadores, puede fabricar objetivos que funcionen bien en teoría, pero cuyas carencias y defectos serán descubiertos en la práctica por los fotógrafos profesionales. En el diseño de sus objetivos, Leica únicamente utiliza ordenadores en aquellos aspectos en los que sus prestaciones resultan verdaderamente útiles ". Geoffrey Crawley

Por tanto, para conseguir la extraordinaria calidad óptica y mecánica y el tipo de imagen que Leica desea en sus ópticas M, todo ello con unas dimensiones y peso muy reducido de objetivos, son totalmente necesarios los ajustes manuales y unas pautas de trabajo lentas, en gran medida artesanales, por parte de los muy cualificados diseñadores ópticos, ingenieros y técnicos de Leica Camera AG, que dominan además el mapa geográfico de vidrios ópticos disponibles con sus índices refractivos y números Abbe que suponen en la práctica una medición del cambio en dichos índices refractivos con las diferentes longitudes de onda lumínica vinculadas a la dispersión del color, prestando atención sobre todo a los vidrios ópticos exóticos con cualidades especiales, como los que se caracterizan por índices de refracción y ratios de dispersión extremos o bien aquellos otros que poseen una alta dispersión parcial anómala.
Por ejemplo, se presta gran atención a la precisión de centrado de los objetivos Leica M, que es llevada a cabo con ayuda de máquinas CNC y técnicos muy cualificados como Enca Leistner, que utilizan instrumentos especiales de medición fabricados por Leica y una tolerancia máxima de desviación axial de 30 segundos, ya que el correcto centrado de un elemento óptico durante la etapa final de su fabricación es un factor de enorme importancia para el rendimiento óptico del objetivo así como la subsiguiente obtención de una muy alta calidad de imagen, por lo que el elemento óptico pulido es centrado y torneado con enorme exactitud hasta conseguir el diámetro externo definido, de tal manera que el eje óptico debe coincidir al 100% con el eje mecánico, lo cual es logrado por Leica utilizando exclusivos métodos de montaje y sistemas de ajuste.

Un objetivo perfecto no sirve para nada si no va correctamente montado, por lo que el centrado y ajuste con la máxima precisión posible del eje óptico figuran entre las máximas prioridades de Leica.

Y hay otro aspecto clave que convierte cada objetivo Leica M de alta luminosidad y muy elevado rendimiento óptico y mecánico en todo un reto para su diseño y desarrollo: cuanto mayor es la pupila de entrada, mayores son las aberraciones, por lo que son imprescindibles unos enormes esfuerzos para poder crear estos objetivos de dimensiones y peso tan sumamente reducidos, y han de utilizarse medios adicionales de corrección óptica, junto con una mecánica de enfoque extraordinariamente compacta.

Por otra parte, con muchos de sus más modernos objetivos M manufacturados entre los años noventa y hoy en día, Leica ha logrado una ulterior proeza mecánica que revela claramente su pericia técnica y experiencia: la inclusión de un elemento flotante en el mismo espacio de cada modelo previo, de tal manera que la versión actualizada mantiene con frecuencia idéntico tamaño miniaturizado y peso liviano, pero obteniendo una excelente y muy uniforme calidad de imagen a todas las aberturas de diafragma y distancias de enfoque, incluso a las más próximas, por lo que al diafragmar apenas se produce mejora en la calidad de imagen, sino únicamente incremento en la profundidad de campo.

Los objetivos Leica M son diseñados y creados para resistir muchas décadas de duro uso tanto por parte de fotógrafos profesionales como aficionados avanzados. Destacan por su gran luminosidad, tamaño muy pequeño y su peso es realmente ligero en comparación con las ópticas profesionales fijas y zooms de las cámaras réflex full frame 24 x 36 mm, además de ser en un muy significativo porcentaje de longitudes focales y máximas aberturas de diafragma el referente cualitativo óptico-mecánico mundial en el ámbito del full format 35 mm.

Además de sus excelentes vidrios ópticos especiales de alta calidad, las ópticas Leicas M incluyen piezas de aluminio y latón, complementadas por tornillos, muelles y palas del diafragma del iris hechos con acero, y los componentes ópticos individuales son ensamblados con precisión muy meticulosa.

Asimismo, la enorme comodidad al utilizarlas disparando a pulso en combinación con la Leica M9 telemétrica y obteniendo excelentes resultados incluso a velocidades de obturación tan bajas como 1/8 s e incluso 1/4 s (aquellas personas con buen pulso y dominando la técnica con softie Abrahamsson) a sensibilidades bajas y medias, es ciertamente encomiable.

Ese es el motivo por el que ópticas como el Summilux-M 50 mm f/1.4 ASPH, Summicron-M 28 mm f/2 ASPH, Apo-Summicron-M 75 mm f/2 ASPH, etc, y el Nikkor-S 50 mm f/1.4 reformulado para la Nikon S3 Millennium Limited Series juegan en otra liga por sí mismos.
Otro rasgo interesante de la S2 es que puede utilizar simultáneamente tanto tarjetas CF como SD, lo cual permite grabar la imagen RAW en la tarjeta CF y la imagen jpeg comprimida en la SD, lo cual permite la clasificación y evaluación de las imágenes en jpeg y por ende una fácil previsualización de las imágenes que se han de seleccionar.

Por otra parte, la S2 funciona con una pila especial 14429 de ion litio de muy larga duración, cuya vida operativa era algo desconocido hasta ahora en el sector del formato medio, y que evita en gran manera que los fotógrafos profesionales tengan que interrumpir el flujo de trabajo de cualquier misión fotográfica debido a que la pila se quede sin energía. De hecho, son muy altas las probabilidades de que no haya que cambiar de pila, independientemente del género fotográfico y el contexto climático en el que se esté trabajando, ya que la S2 permite a los fotógrafos profesionales crear más imágenes con sólo una de ellas: hasta 1.000 frames. Y además, esta pila especial de ion litio no padece efecto memoria, por lo que las unidades parcialmente gastadas pueden ser recargadas sin merma alguna en su rendimiento energético.

Leica X1, la cámara compacta digital que obtiene en la actualidad una mayor calidad de imagen de entre las existentes con tamaño de sensor APS-C, gracias a su excelente objetivo Elmarit 24 mm f/2.8 ASPH de 8 elementos en 6 grupos (uno de ellos asférico), equivalente a una focal de 36 mm en formato 24 x 36 mm y diseñado ex profeso para su captor digital. Esta preciosa cámara de 12.2 megapíxels destila elegancia y clasicismo por doquier y hacer fotografías con ella se convierte en algo instintivo una vez se aprende a utilizarla con rapidez, aportando además sensibilidades entre 100 y 3200 ISO con posibilidad de ajustes intermedios, un versátil flash integrado que puede sincronizarse a la primera o segunda cortinilla, reducción de ojos rojos, sincronización lenta, etc.

Addenda 1-1-2011.- El firmware v2.0 de muy reciente aparición, potencia notablemente las capacidades fotográficas de la Leica X1, con una amplia gama de mejoras, entre las que cabe destacar una mayor rapidez de autofocus tanto en condiciones de baja luminosidad como con sujetos de bajo contraste, una escala de profundidad de campo que aparece al utilizar enfoque manual, una superior calidad de imagen JPEG, un enfoque manual de mayor velocidad y precisión y una imagen de monitor con mayor nitidez que permite un mejor enfoque manual cuando se trabaja a plena abertura. Photo: José Manuel Serrano Esparza


Otra vista de la cámara compacta high end APS-C Leica X1. Hacía tiempo que no se veía en el mercado fotográfico un modelo de tal prestancia y muy bello objeto de deseo que rezuma clase y elegancia por doquier además de un objetivo de rendimiento óptico hoy por hoy referencial dentro del segmento de cámaras compactas formato APS-C, que obtiene una extraordinaria calidad de imagen en el centro y muy buena en bordes y esquinas, con admirable uniformidad de rendimiento entre máxima abertura f/2.8 y f/8, además de exhibir niveles cero de viñeteado a f/4 y f/5.6 e insignificantes en la práctica a f/4. La distorsión es también cero a todas las distancias de trabajo excepto a las más próximas, que arrojan unos niveles apenas detectables. Es capaz de enfocar desde 30 cm a infinito y posee velocidades de obturación entre 1/2000 seg y 4 seg, siendo DNG y JPEG sus formatos de archivo de imagen. La X1 destaca además por lograr una gran calidad de imagen a las sensibilidades más altas, faceta en la que esta cámara es también probablemente la referencia entre las compactas con captor APS-C, tal y como ha demostrado por ejemplo Steve Huff en su The Leica X1 Daily Image Sample Diary (véase por ejemplo la fotografía obtenida a iso 3200 del gato bostezando, no sólo en cuanto a notable ausencia de ruido, poder de resolución, nitidez y contraste, sino también en captación muy fidedigna, realmente encomiable, de colores y texturas. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Leica X1 en su configuración ideal con el visor accesorio de 36 mm de alta luminosidad instalado en la zapata de flash de la cámara y que garantiza una visión muy nítida, sin ulterior consumo de energía de pila. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Vista diagonal superior de la Leica X1 con el visor accesorio de alta luminosidad. En caso necesario, la pantalla de esta muy pequeña cámara dotada de sensor grande y objetivo fijo Elmarit 24 mm f/2.8 ASPH, equivalente a un 36 mm en formato 24 x 36 mm, puede ser apagada mientras se usa este excelente visor óptico opcional, y a partir de ese momento, un LCD ubicado en lugar bastante visible indica el momento en que se logra un enfoque automático preciso. Otro de los rasgos importantes que caracterizan a esta cámara es su tremendamente silencioso ruido de obturador, apenas perceptible, y comparable en mi opinión en este sentido a los decibelios producidos por la liberación de los obturadores de seda engomada y recorrido horixontal de modelos analógicos con montura de rosca como la Leica IIIf Red Dial, por lo que hacer fotos con la X1 se convierte en algo referencial en cuanto a discreción y pasar desapercibido, lo cual es notablemente potenciado por las dimesniones muy pequeñas de la cámara (124 x 60 x 32 mm) y un muy ligero peso (306 gramos cámara y objetivo). Photo: José Manuel Serrano Esparza

Aunque en mucho menor porcentaje, también ha influído en esta espectacular mejora de resultados económicos en Leica la solidez y confianza de los clientes en su gama alta de prismáticos Geovid HD 42 y 56 con magnificación 8x y 15x respectivamente, dotados con telémetro láser de gran precisión y vidrios de fluoruro, así como con revestimiento especial Aquadura en sus elementos ópticos y que son capaces de soportar condiciones climáticas extremas y el más duro uso profesional, logrando una excepcional brillantez y detalle de imagen.

UN MOMENTO HISTÓRICO
Si tenemos en cuenta las muy singulares circunstancias previas que han dado origen a las cifras económicas de beneficios recién desveladas por Leica y las muy difíciles condiciones financieras en las que se encontraba la empresa en 2005, Leica ha conseguido en mi opinión, merced sobre todo a la M9 full frame y a la S2 de formato medio así como a su excelente surtido de objetivos de alta luminosidad y rendimiento óptico muy homogéneo entre plena abertura f/2.5 y f/3.5 y f/8 (hasta el punto de que en un porcentaje muy elevado de ellos apenas se produce mejora en la calidad de imagen al diafragmar) uno de los éxitos de ventas más significativos en la historia de la fotografía en el segmento de cámaras profesionales high end, quizá sin precedentes desde los tiempos del gran Joe Ehrenreich, genio de la distribución y auténtico motor impulsor de la Nikon F en Estados Unidos durante los años sesenta con su EPOI, cuando con gran visión de futuro se dió cuenta de que esta cámara réflex japonesa formato 35 mm cambiaría el panorama fotográfico mundial.

Y dicho carácter muy revelador de la más que notable mejora económica de Leica emana no sólo del muy importante incremento en la cifra de ventas, sino también del hecho de que se produce en medio de una coyuntura internacional de considerable recesión económica que era la menos propicia para ello, lo cual dice mucho del nivel cualitativo óptico, mecánico y de fiabilidad de sus productos, además de corroborar sin ambages la plena y definitiva transición al ámbito digital por parte de Leica, que comenzó con la presentación de la Leica M8 en la Photokina 2006, seguida posteriormente por la Leica M8.2, hasta llegar a Septiembre de 2009, cuando fue lanzada la Leica M9 mirrorless formato 24 x 36 mm con aspect ratio 3:2, que mantiene la extraordinaria calidad de imagen de la Leica M8 y M8.2, pero que con sus 18 megapixels (casi el doble) duplica las posibilidades de hacer ampliaciones de gran calidad sobre papel fotográfico, la auténtica piedra de toque donde destaca sobremanera esta obra maestra de ingeniería y trabajo artesanal, aportando resultados muy próximos en calidad a los de cámaras analógicas de formato medio y ópticas fijas de gama alta, cuyos negativos sean digitalizados con scanner profesional de tambor, tal y como demostraron el Dr. Edward Schwartzreich y Brian Bower en 2007.

Obviamente, Leica nunca alcanzará las cifras de ventas de empresas del sector fotográfico económicamente mucho más fuertes, como puedan ser Canon, Nikon o Sony, a las que respeta profundamente, al igual que al resto de firmas del sector fotográfico.

El año 2010 ha supuesto un punto de inflexión en la historia de la empresa fotográfica alemana, tal y como han demostrado las cifras económicas recién desveladas por Leica Camera AG Solms. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Pero éste más que notable impulso económico durante el último año por parte de Leica, constituye un importante golpe de timón de enorme mérito, ya que se produce en unas circunstancias de mercado de profunda crisis económica generalizada, y ha estado precedido desde 2006 por su puesta en el mercado fotográfico de cámaras y objetivos de auténtica talla mundial como la Leica M8, M8.2, M9, Leica S2, M9 Titanium, Tri-Elmar-M 16-18-21 mm f/4 ASPH, Summilux-M 24 mm f/1.4 ASPH, Summilux-M 21 mm f/1.4 ASPH, Elmar 24 mm f/3.8 ASPH, Super Elmar 18 mm f/3.8 ASPH, Leica Noctilux-M 50 mm f/0.95 ASPH y el nuevo Summilux-M 35 mm f/1.4 ASPH (que reduce prácticamente a cero el blendendifferenz, logrando por tanto superiores niveles de nitidez mediante la incorporación de un elemento óptico flotante, lo cual mejora a la vez el rendimiento óptico en las distancias de enfoque más cortas), todo ello con el complemento del Sistema S de objetivos (Summarit-S 70 mm f/2.5 ASPH (CS), Leica Apo-Macro Summarit-S 120 mm f/2.5 CS, Leica Apo-Elmar-S 180 mm f/3.5 CS y Leica Summarit-S 35 mm f/2.5 ASPH CS, más los de próxima aparición) que son las ópticas más perfectas jamás construídas en la historia de la fotografía, como demuestran tanto sus curvas MTF como especialmente las pruebas de campo realizadas hasta la fecha por diferentes fotógrafos profesionales de distintos países y continentes.

Leica M9 full frame telemétrica con estuche de cuero y objetivo Summicron-M 35 mm f/2 ASPH. La belleza de líneas clásica y única de las legendarias cámaras telemétricas analógicas de serie M ha sido transferida a la más compacta cámara digital mirrorless full format 24 x 36 mm con ópticas intercambiables del mundo, que ha sido un enorme éxito, habiendo alcanzado unas cifras de ventas impresionantes por todo el mundo desde su presentación en Nueva York (Estados Unidos) el 9 de Septiembre de 2009, apuntando claramente los indicios a que dicha tendencia aumentará todavía más si cabe durante el próximo año, gracias al feedback aportado tanto por entusiastas de la fotografía como por fotógrafos profesionales que han podido adquirirla.

Obviamente, es una cámara de precio elevado, pero es más barata que réflex profesionales high end full frame entre 20 y 25 megas como la Canon EOS 1Ds Mark III o la Nikon D3x, al tiempo que la calidad óptica y mecánica sin paliativos de los objetivos Leica M no retrofoco, construídos sin compromisos de ningún tipo, en especial los más modernos fabricados desde los años noventa hasta la actualidad y dotados de superficies asféricas y gran luminosidad, permiten disparar a pulso con la Leica M9 y dar una calidad de imagen superior a ambas hasta ISO 640 inclusive, tal y como ha demostrado Brian Bower, uno de los mayores expertos del mundo en cámaras y objetivos Leica, en su excelente libro apéndice Leica M Digital Photography M9 editado por Lark Photography Books, habiendo probado además que si se tiene cuidado en realizar una exposición correcta, la M9 puede lograr resultados plenamente profesionales disparando a pulso a ISO 1250 (foto de las páginas 8 y 9 del citado libro de Brian Bower, en la que aparece en tamaño 30.4 x 15.4 cm la fotografía de una locomotora de vapor Duchess of Hamilton realizada con Leica M9 y Summicron-M 35 mm f/2 ASPH a 1/30 seg en condiciones de luminosidad extremadamente bajas, potenciando intencionadamente detalle en las zonas highlight) y buenos a ISO 2000 (foto de la Torre Eiffel hecha de noche con Leica M9 y objetivo superangular Super Elmar-M 18 mmf/3.8 ASPH a ISO 2000 y velocidad 1/15 seg, que aparece en la página 23 en tamaño 27.8 x 16.8 cm). Photo: José Manuel Serrano Esparza.


" La Leica M9 ha conseguido por fin llevar a cabo la máxima aspiración de los entusiastas del Sistema M: Una Leica M full frame digital perfectamente integrada como evolución del icónico sistema M de película y que es plenamente capaz de competir con las réflex digitales full frame profesionales de mayor nivel y capacidad en megapixels del mercado. El aspecto general, tamaño y manejo de la Leica M9 son virtualmente idénticos a los de una Leica M con captor analógico, por lo que Leica ha conseguido preservar la vital continuación en el ámbito digital 24 x 36 mm que era tan esencial para la evolución del Sistema Leica M ". Brian Bower

Evidentemente, sendos buques insignia reflex digitales profesionales aportan mayor calidad de imagen por encima de ISO 1000, pero la ausencia de espejo basculante permite en mi opinión disparar a pulso con la M9 sin trepidación y plenas garantías de poder captar las imágenes en situaciones de baja luminosidad a isos bajos e intermedios con velocidades de obturación dos veces más lentas que las que precisarían las mencionadas soberbias réflex high end a idénticas sensibilidades para poder salvar fotos en tales contextos.
Y si añadimos un Abrahamsson softie, estaríamos hablando de velocidades de obturación tres veces más lentas y resultados consistentes tirando a pulso con la M9 a 1/15 seg e incluso a 1/8 seg aquellas personas con muy buen pulso, adecuada técnica de respiración y que dominen el timing del softie.


El Espíritu de Mr B ha jugado un importante papel en el Renacimiento de Leica en plena Era Digital. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Y si deseamos esforzarnos por conseguir la mejor calidad posible con la M9 entre ISO 160 e ISO 640, hay una alternativa más: utilizar un monopie profesional muy ligero y a la vez de gran estabilidad y robustez, que sea muy cómodo de transportar plegado, utilizando el tiempo que sea preciso para hacer la composición y el encuadre, además de elegir la velocidad de obturación y diafragma que necesitemos para nuestros objetivos. En esta imagen podemos ver a Bill Caldwell, Immediate Past President de la LHSA y experto usuario de equipo Leica desde hace muchas décadas y Summicron-M 50 mm f/2 Versión 4 (1979-1994, diseñado por Walter Mandler) con parasol 12585 sobre monopie Gitzo.

La M9 que aparece en la imagen lleva además una lente original Leica de aumento de visor 1.25x (12004) , de diseño telescópico, formada por dos elementos en dos grupos y gran calidad óptica, fabricada en aluminio anodizado de color negro, que agranda un cuarto la imagen del visor, incrementando el factor de aumento hasta 0.90x (en comparación con la magnificación original 0.68x del excelente visor de la M9), y permite un enfoque extremadamente preciso y fácil con un objetivo standard de 50 mm y ópticas de mayor focal.

Por su parte, la lente original Leica de aumento de visor 1.4x (12006) que agranda en dos quintos la imagen del visor y obtiene un factor de aumento 1x (visor 1:1 que permite ver con ambos ojos lo que queremos fotografiar) con la M9, es todavía más adecuado si cabe para lograr un enfoque y encuadre muy precisos con teles de 75, 90 y 135 mm, pero con objetivos de 50 mm únicamente puede verse la marca luminosa de encuadre sin espacio alrededor de ella, no obstante lo cual es una muy buena opción para usar las ópticas standard de mayor luminosidad como el Noctilux-M 50 mm f/0.95 ASPH, el Noctilux-M 50 mm f/1 y el Voigtländer Nokton 50 mm f/1.1 ASPH y el Summilux-M 50 mm f/1.4 ASPH). Photo: José Manuel Serrano Esparza.

Otra vista de la Leica M9 con estuche de cuero. Por increíble que pueda parecer, un año y cuatro meses después de la presentación de esta muy moderna cámara telemétrica full frame digital en Septiembre de 2009, debido a la enorme cantidad de peticiones para adquirirla desde el mismo día de su lanzamiento al mercado, hubo de establecerse una lista de espera, que ha ido aumentando más y más hasta llegar al momento presente en Febrero de 2011, habiéndose generado unos niveles de ventas y expectación que probablemente llevaban sin tener lugar en el entorno de las cámaras telemétricas 24 x 36 mm desde 1955, el año cumbre de la Leica M3, en el que se vendieron 48.951 unidades.

De este modo, se está produciendo en estos momentos un segundo gran Renacimiento Telemétrico, ahora en el ámbito digital, casi once años después de que Roger Hicks (gran autoridad en temas fotográficos, experto de talla mundial en cámaras telemétricas y sus ópticas así como profesor de fotografía, que ha escrito más de treinta libros sobre fotografía, muchos de ellos con su esposa Frances Schultz, sin olvidar su famosa sección ´A Matter of Opinion´ en la revista Amateur Photography, muchos artículos en la revista PHOTO Techniques, etc) escribió un gran artículo en la revista Shutterbug de Mayo de 2000 titulado Return of the King: Rangefinders Make a Comeback´ en el que explicó el espectacular resurgir de las cámaras analógicas telemétricas de 35 mm que estuvo teniendo lugar durante los últimos años del Siglo XX. Photo: José Manuel Serrano Esparza


Aunque el Sistema Leica M Digital está especialmente concebido para fotografiar a pulso con la luz ambiente disponible, la llegada de la M9 ha catalizado un importante aumento en las posibilidades de uso de flash electrónico, ya que hay ocasiones en que se necesita sacar el máximo partido posible del equipo Leica M a la hora de conseguir plasmar escenarios que requieran más potencia lumínica y sobre todo un mayor control de la luz.

Comparada con la velocidad de sincronización de 1/50 seg de cámaras clásicas Leica M analógicas como la M4P, M6 y M7, en mi opinión la velocidad de sincronización de flash de 1/180 seg de la M9 podría ser considerada lo suficientemente rápida, y junto con la correcta elección de velocidades de obturación y diafragmas (a lo cual hay que añadir la valiosa ventaja de poder trabajar con diferentes ISOS, a diferencia de las clásicas Leica M analógicas en las que todo había de realizarse con la sensibilidad específica de la película ubicada en el interior de la cámara), debería aportar buenos resultados en la inmensa mayoría de contextos habituales de trabajo en manos de fotógrafos experimentados o aficionados avanzados que sepan lo que hacen.

Carl Merkin, fotógrafo profesional residente en Nueva York, uno de los directores de la LHSA y reconocido experto en Leica (con más de 40 años de trayectoria en el mercado en el ámbito de la fotografía publicitaria y de catálogo, principalmente con cámaras de gran formato y Hasselblad) y que ha trabajado con un muy amplio surtido tanto de objetivos Leica M como R desde finales de los años ochenta (habiendo utilizado también cámaras Nikon de 35 mm durante los setenta y ochenta), es capaz de conseguir excelentes resultados con flash mediante su pericia técnica y un equipo muy versátil, sabiamente elegido, constituído por una Leica M9, un Tri-Elmar-M 28-35-50 mm f/4 ASPH, un Macro-Elmar-M 90 mm f/4 (que tan sólo pesa 240 g y es la versión más liviana, ya que el modelo de latón cromado pesa 80 g más), un Elmarit-M 135 mm f/2.8 versión 2 (diseñado en Canadá por Walter Mandler en la fábrica Leitz de Midland, Ontario), y un pequeño flash Metz 32CT3 System SCA-300, muy compacto y que posee cabezal giratorio, tres automatismos, posición manual y TTL, produciendo la gran calidad de luz habitual en los flashes Metz, todo ello con el complemento añadido de un Lumiquest Pro Max 80-20. Photo: José Manuel Serrano Esparza

En esta imagen podemos ver a Carl Merkin con su Leica M9, objetivo Tri-Elmar-M 28-35-50 mm f/4 ASPH, flash Metz 32CT3 System SCA-300 y accesorio Lumiquest Pro Max 80-20. La complejidad mecánica de este gran objetivo de 8 elementos (dos de ellos asféricos y cinco fabricados con vidrios ópticos especiales de alta refracción) en 6 grupos es grande, ya que no está basado en el principio de elementos zoom constantemente flotantes, sino que cuando se modifica su longitud focal, el diafragma del iris cambia su configuración al mismo tiempo que los tres elementos traseros, mientras que la correspondiente marca luminosa de encuadre es simultáneamente activada en el visor, llevándose a cabo el enfoque mediante los tres elementos delanteros.

Es uno de los mejores objetivos Leica M jamás fabricados, logrando una altísima calidad de imagen en cada una de las respectivas focales, que iguala a las mejores ópticas asféricas Leica M de 28, 35 y 50 mm a f/4, además de ofrecer notables niveles de compacidad y versatilidad.

Su dilatada experiencia de varias décadas manejando diferentes contextos lumínicos le permiten dominar la luz en interiores, controlándola con maestría, según las condiciones de luminosidad existentes, unas veces para incrementar los niveles de luz bajo circunstancias de iluminación muy tenue y otras para lograr un equilibrado flash de relleno, utilizando también con frecuencia el accesorio Lumiquest Pro Max 80-20 para iluminar rebotando la luz en techos de colores neutros que actúan como reflectores, aportando a la vez un porcentaje de flash de relleno procedente de la reflexión simultánea de la luz artificial en el propio accesorio.

Volviendo al Macro-Elmar-M 90 mm f/4, aunque su abertura máxima es relativamente pequeña, se trata de un objetivo tele idóneo para diferentes misiones fotográficas, es más fácil y rápido de enfocar que otras ópticas de 90 mm f/2 y f/2.8 más luminosas, y su rendimiento óptico es extraordinario, al mismo nivel a f/4 que el Elmarit-M 90 mm f/2.8 y el Apo-Summicron-M 90 mm f/2, siendo mucho más ligero y pequeño que ambos (de hecho, el Macro-Elmar-M 90 mm f/4 es el tele más compacto fabricado hasta la fecha por Leica, por lo que su facilidad de transporte es otra importante cualidad).

Si tenemos en cuenta además que esta pequeña joya alcanza la cima de su rendimiento óptico a máxima abertura f/4, con impresionantes valores de poder de resolución, nitidez y contraste que se aproximan notablemente a los ofrecidos por el Macro-Elmarit-R 100 mm f/2.8 a f/4, que comienza a estar limitado por difracción a f/5.6, que es uno de los objetivos Leica M más rápidos y precisos de enfocar, que posee una muy favorable distancia mínima de enfoque de 0.78 m, y que su diafragma alberga 10 palas logrando un excelente bokeh a f/4, parece claro que este objetivo ciertamente único puede convertirse en una herramienta fotográfica a tener muy en cuenta en manos de un fotógrafo profesional. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Carl Merkin con su Leica M9, Elmarit-M 135 mm f/2.8 versión 2, flash Metz 32 CT3 System SCA-300 y accesorio Lumiquest Pro Max 80-20.

La llegada de la Leica M9 ha potenciado notablemente las posibilidades de uso de objetivos de 135 mm de serie M en comparación con su uso con la M8 y M8.2, que era muy restringido, las más veces engorroso y en la práctica se convertía en una focal bastante más larga que 135 mm debido al factor multiplicador 1.3x. Ahora, con la Leica M9 es posible acoplarlos manteniendo su auténtica longitud focal, y cuando son utilizados con anteojos dotados con magnificación 1.5x y el telémetro está bien calibrado, se convierten en ópticas tele muy valiosas, especialmente para retratos.

El Elmarit-M 135 mm f/2.8 versión 2 1977-1998 (que lleva incroporado un parasol deslizable y filtro frontal E55) da mucha más calidad de imagen que la primera versión (con aro de enfoque festoneado y que utiliza filtros de Serie VII), sus anteojos están mejor construidos y utiliza la marca luminosa de encuadre de la focal 90 mm, pero magnifica la imagen del visor para acoplarla a la de la focal de 135 mm, que es el área mostrada por él.

Es un excelente objetivo que aporta muy buenos niveles de poder de resolución, nitidez y contraste, sin alcanzar por supuesto los del más moderno Apo-Telyt-M 135 mm f/3.4 (cuyo uso con la M9 es mucho más limitado en lo tocante a trabajar a grandes aberturas, ya que ha de utilizarse al menos dos puntos de diafragma por debajo de su luminosidad máxima, mientras que el Elmarit-M 135 mm f/2.8 puede ser usado a su máxima abertura f/2.8 sin problemas, gracias a la anteriormente mencionada magnificación 1.5x de la imagen que obtienen los anteojos), pero con superior gradación tonal y estética de imagen Leica feeling, junto con un enfoque manual muy suave y preciso.

Por tanto, la exactitud de enfoque que puede conseguirse con este Elmarit-M 135 mm f/2.8 versión 2 es notable, ya que generalmente las cámaras telemétricas comienzan a ser progresivamente menos precisas en su enfoque desde las focales de 75 ó 90 mm en adelante, dependiendo de la luminosidad máxima del objetivo, si bien no es menos cierto que la correcta calibración del telémetro gran base de telémetro así como su amplia base efectiva que ha caracterizado tradicionalmente a las Leicas M (y que continúa plenamente vigente con el excelente telémetro con magnificación 0.68x de la Leica M9) en combinación con los excelentes magnificadores Leica 1.25 x (12004) y 1.4 x (12006) solucionan las cosas de manera brillante, aumentando en 1.25x y 1.4 x respectivamente tanto la imagen del visor como la longitud efectiva del telémetro, lo cual hace posible un enfoque muy preciso con objetivos Leica M de 50 mm, 75 mm, 90 mm e incluso 135 mm. Photo: José Manuel Serrano Esparza

El sistema de codificación 6-bit se ha revelado como un dispositivo muy eficaz para lograr una excelente simbiosis entre los objetivos Leica M y el sensor digital full frame 24 x 36 mm de la Leica M9. Aquí podemos ver un Summicron-M 75 mm f/2 ASPH. Photo: José Manuel Serrano Esparza

El diseño y fabricación de objetivos extraordinarios con rendimiento óptico muy uniforme entre máxima abertura y f/8 ha sido denominador común en Leica, especialmente desde 1990, cuando Lothar Kölsch creó el Departamento de Diseño Óptico de Leica Camera AG, trabajando con los diseñadores ópticos Peter Karbe (por entonces Director del Departamento de Desarrollo Óptico), Horst Schröder y Sigrun Kammans, potenciando sobre todo el desarrollo de ópticas muy luminosas optimizadas para lograr la máxima calidad de imagen a plena abertura, dedicándose intensivamente a la mejora constante de las lentes asféricas, lo cual produciría un salto cuántico de los objetivos Leica en lo tocante a poder de resolución, nitidez y contraste, junto con la habitual construcción mecánica sin compromisos de ningún tipo, que permite mantener indemnes las cualidades ópticas y mecánicas durante muchas décadas de uso. Esta tendencia ha proseguido hasta la actualidad y es vívidamente representada por objetivos que son en un elevado porcentaje de casos el referente mundial en sus respectivas longitudes focales y luminosidades máximas, como por ejemplo el Summilux-M 24 mm f/1.4 ASPH. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Summilux-M 21 mm f/1.4 ASPH. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Noctilux-M 50 mm f/0.95 ASPH. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Summarit-S 70 mm f/2.5 ASPH (CS). Photo: José Manuel Serrano Esparza

Apo-Macro Summarit-S 120 mm f/2.5 ASPH (CS). Photo: José Manuel Serrano Esparza

Apo-Elmar-S 180 mm f/3.5 ASPH (CS). Photo: José Manuel Serrano Esparza

EL FRUTO DE UN GRAN TRABAJO Y VISIÓN DE FUTURO

Estos resultados económicos no son únicamente resultado del diseño y fabricación de productos de soberbia calidad y fiabilidad orientados al más duro uso profesional, sino también de una brillante gestión empresarial llevada a cabo en condiciones de extrema dureza a partir del 8 de Febrero de 2005, cuando Andreas Kaufmann se convirtió en Miembro del Consejo de Administración de Leica Camera AG, pasando a ocupar respectivamente los cargos de Presidente del Consejo de Administración durante 2007, Vicepresidente del Consejo de Administración entre el 19 de Noviembre de 2007 y el 22 de Febrero de 2008, Presidente Interino del Consejo de Administración entre el 23 de Febrero de 2008 y el 28 de Febrero de 2009 y Vicepresidente del Consejo de Administración de Leica Camera AG.

Dr. Andreas Kaufmann impartiendo la histórica conferencia El Futuro de los Recuerdos. Photo: José Manuel Serrano Esparza.

La conferencia El Futuro de los Recuerdos impartida por Andreas Kaufmann durante el año 2008 constituyó un punto de inflexión en la Historia de la Fotografía Digital, que tuvo como núcleo central la Leica S2 y sus extraordinarios objetivos, un auténtico tour de force óptico en el ámbito del formato medio, además de prever el gran futuro de la legendaria empresa fotográfica alemana, con la progresiva introducción durante los años venideros de una amplia gama de nuevos productos basados en dicha plataforma tecnológica, explicando con detalle el principio básico de que la calidad óptica de los objetivos será en la era digital un factor todavía más decisivo que en la analógica.

Este hombre, gran amante de la fotografía, que visita con mucha frecuencia exhibiciones fotográficas por todo el mundo, gran promotor de Wien Leica Shop Westlicht Photographica Auctions and Schauplatz fur Fotografie y Galerías Leica en Salzburgo, Tokio, Nueva York, Viena, Frankfurt, Solms, etc, y enamorado de la marca Leica y sus productos, fue consciente de la importancia histórica de la firma fotográfica alemana y se convirtió desde 2005 en el alma mater del resurgir de Leica a nivel mundial, desarrollando un ímprobo esfuerzo personal para sacar adelante a la empresa, convirtiéndose en el máximo accionista e invirtiendo dinero propio de su empresa ACM Projectentwicklung como garantía económica y especialmente en calidad de soporte para dos proyectos grandiosos:


a) El desarrollo de una Leica telemétrica full frame digital que mantuviera las líneas de las legendarias Leica M tradicionales de 35 mm así como su filosofía y modo de fotografiar, que pudiera utilizar además una muy amplia gama de objetivos Leica M y de rosca fabricados durante los siglos XX y XXI. Es decir: la Leica M9.

b) El Proyecto AFRIKA para la fabricación de una cámara digital reflex de formato medio ligeramente más pequeña que las réflex profesionales de gama alta, concebida tanto para fotografía en exteriores (disparando a pulso en muchos contextos diferentes, sin trípode ni monopié, a velocidades de 1/500 seg y superiores) como en interiores (estudio, moda, comercial, de producto, bodegón, bodas y todo tipo de eventos, usando trípode), construída como un tanque, con un sellado integral antipolvo y antilluvia, capaz de aguantar el más duro uso profesional y conectable a un amplio surtido de ópticas intercambiables de formato medio que habrían de ser los mejores objetivos fotográficos jamás fabricados en el planeta. Es decir: La S2.

´ La S2 es un instrumento fotográfico en su forma básica, para aquellos que saben hacer fotografías. Una cámara es un instrumento para la consecución de un fin. Es una herramienta construida y concebida para hacer ciertas cosas y conseguir ciertos objetivos, en especial captar la luz; con la mayor precisión posible en el tiempo y en la definición de los rayos de luz, reflejos, colores, etc, sin añadir o restar nada a su auténtica naturaleza. En eso consiste una cámara fotográfica y su función´ Thorsten Overgaard


Cuerpo de Leica S2. La introducción de esta revolucionaria cámara de formato medio ha constituido un punto de inflexión en la Historia de la Fotografía Digital, al igual que sus ópticas del Sistema S, cuyo rendimiento óptico es el mejor jamás obtenido con objetivos de formato medio, lo cual la permite superar con facilidad la calidad de imagen lograda por cámaras réflex digitales de formato medio con sensores más grandes y el doble o más cantidad de megapíxels, algo que ya sucedía por ejemplo en el ámbito fotográfico de formatos más pequeños con la cámara réflex Olympus E-1 Cuatro Tercios digital (dotada de espejo basculante y un sensor CCD KAF-5101CE CCD), que conectada a los excelentes objetivos Zuiko Digital ED de gama profesional superaba claramente a muchas cámaras reflex digitales APS-C de 8, 10, y 12 megas de otras marcas.

Del mismo modo, una Pentax K10D con sensor CCD de 10 megapíxels conectada a un objetivo Pentax SMC-FA 77 mm f/1.8 Limited (fantástico tele corto de dimensiones y peso muy reducidos, gran rendimiento óptico con destacado equilibrio entre poder de resolución, contraste, nitidez casi 3D en las zonas enfocadas y muy bello y sutil bokeh, además de una excelente construcción mecánica) supera la calidad de imagen obtenida por muchas cámaras reflex APS-C de 14 y 18 megapíxels acopladas a buenos objetivos.


Una elevada cantidad de píxels no es en absoluto garantía de gran calidad de imagen. Aunque hay quienes creen erróneamente que cuanto mayor es el número de megapíxels de una cámara mayor es la calidad de imagen, ello no es cierto en absoluto, ya que existen otros parámetros mucho más importantes que el número de megapíxels, en especial dos: el rendimiento óptico y mecánico de los objetivos en sinergia con el captor digital, y la máxima calidad posible del sensor, que permita un amplio rango dinámico, buen rendimiento a isos altos, etc, sin olvidar que existen muchos fotógrafos profesionales usuarios de formato medio con abundante experiencia que afirman que la cota de 40 megapíxels es más que suficiente para poder obtener espléndidos resultados incluso en fotografía de paisaje con grandes ampliaciones sobre papel fotográfico, y que a partir de una distancia de observación de 1 metro, las supuestas ventajas de sensores de entre 60 y 100 megapíxels desaparecen en gran medida.

Por otra parte, por muy buenos que puedan ser el sensor y el DSP ( y por supuesto son elementos importantes de cualquier cámara digital en la que la calidad de imagen obtenida por el objetivo dependerá de la sinergia entre el rendimiento óptico del mismo, la calidad del sensor y el firmware), la calidad óptica de los objetivos era, es y seguirá siendo el factor más importante para conseguir imágenes de alta calidad.

Es cierto que hasta cierto punto, el firmware puede corregir distorsiones, aberraciones cromáticas, acutancias, contrastes, etc, y que la tecnología en constante evolución fabrica cada vez mejores sensores que acoplados a filtros de paso bajo y procesado de imagen inteligente dentro de cámara durante la toma pueden mejorar el rendimiento base del tándem cámara/objetivos, pero en mi opinión, aún siendo capaces de producir resultados muy buenos, difícilmente podrán tales sistemas electrónicos correctores suplir a ópticas de calidad incontestable a la hora de alcanzar las calidades máximas posibles de de imagen, y en un porcentaje significativo de ocasiones ralentizarán las velocidades de trabajo en post processing, limitando también en mayor o menor grado las posibilidades de extraer el máximo partido posible de programas como Adobe Photoshop, Lightroom, etc.


Por supuesto, ello no significa en absoluto que los archivos producidos tanto por soberbias cámaras digitales de formato medio como reflex full frame 24 x 36 mm de otras marcas no puedan conseguir una excelente calidad de imagen, que de hecho obtienen y es más que sobrada para la mayoría de aplicaciones y tareas fotográficas en las que son utilizadas, además de que frecuentemente poseen una interesante relación calidad / precio y una excelente gama de ópticas fijas y zooms profesionales.

Pero los archivos DNG originales producidos por la Leica S2 son de una calidad excepcional, desconocida hasta ahora en el ámbito de la fotografía de formato medio digital, muy puros y sin alteración por software, por asombroso que pueda parecer, con lo que tanto la cantidad de postprocesado de imagen que se necesite como el tiempo empleado en ello se reducen enormemente, y el fotógrafo profesional puede tratar los archivos RAW prístinos de modo personalizado (por ejemplo, aplicando la máscara de enfoque más adecuada, etc) con enorme margen de maniobra y rapidez, a mi entender bastante superior en esta faceta a las cámaras que llevan a cabo un fuerte "in camera processing" desde el mismo momento de la captura.

Tal es la calidad de las ópticas de formato medio de la S2, que no precisan corrección por software. No hay diferencias en calidad de imagen entre centro y bordes, y el poder de resolución, nitidez y contraste son excepcionales de esquina a esquina, incluso a diafragma abierto. No hay aquí exageración de ningún tipo ni ostentación alguna. Y tampoco existe ditirambo alguno si se afirma que la S2 no precisa postprocessing (la inmensa mayoría de veces, sólo será necesario llevar a cabo el sharpening conforme a las preferencias personales que precisa todo archivo digital, incluso aquellos que carecen de filtros AA), lo cual abrevia enormemente el tiempo que el fotógrafo profesional ha de usar el ordenador, lo cual es una importante ventaja a la hora de acelerar las fases de producción.


Simplemente, Leica se jugaba su futuro con la S2 y el único camino era la máxima excelencia óptica posible, un denominador común durante toda su historia, pero ahora más que nunca, ya que lo realizado por Peter Karbe con los objetivos de formato medio del S-System de gran luminosidad de la S2 era de una dificultad extrema y constituye el mayor tour de force óptico realizado hasta la fecha (los objetivos S-System superan en calidad óptica y mecánica no sólo a todo lo existente hasta la fecha en formato medio, sino también en 35 mm, y es geométricamente más prolijo diseñar objetivos de este nivel y luminosidad para formato medio que para cámaras de paso universal, lo cual da idea de la manitud de la proeza), y a mi entender, los niveles cualitativos de imagen obtenidos por la S2 entroncan bastante más con las cámaras analógicas de gran formato 8 x 10 (20 x 25 cm) y ópticas Schneider, Rodenstock, Fujinon y Nikkor que con el formato medio analógico, con el cual se halla más vinculada en mi opinión la calidad de imagen que dan por ejemplo buques insignia como la Nikon D3x, Leica M9, Canon EOS Ds Mark III, etc.

Por tanto, gracias a la sinergia entre la Leica S2 y los objetivos del S-System (que son la referencia óptica y mecánica en objetivos dentro del entorno del formato medio), su avanzado sensor digital de formato medio CCD KAF-37500 de última generación (50% más grande que la película de 35 mm tradicional) y el procesador de imagen Fujitsu MAESTRO, no se precisan correcciones por software, y ello reduce notablemente el tiempo que se ha de emplear en el tratamiento posterior de las imágenes, con las enormes ventajas que todo ello conlleva, sobre todo para los fotógrafos profesionales que han de trabajar con considerables volúmenes de workflow, grandes agencias de publicidad, cobertura de todo tipo de eventos y celebraciones en interiores y exteriores, etc.

Además de ser una gran cámara para paisajes, (la función de levantamiento de espejo es muy útil para reducir al máximo posible las vibraciones), la S2 que ha demostrado también ser una herramienta fotográfica de primerísimo nivel en los campos de la fotografía comercial de producto, bodas, moda y estudio, gozando además de las múltiples posibilidades que aporta su avanzado sistema dual de obturación, que permite utilizar tanto objetivos muy luminosos mediante el obturador plano focal ubicado en el cuerpo de cámara (con los que pueden alcanzarse velocidades de sincronización de flash de hasta 1/125 seg) como objetivos con obturador central (CS) situado dentro del barrilete de cada óptica (y con los que pueden lograse altas velocidades de sincronización de flash de hasta 1/500 seg), una opción muy útil en fotografía de estudio, moda y flash de relleno en exteriores. Photo: José Manuel Serrano Esparza


Leica S2 con Summarit-S 70 mm f/2.5 ASPH (CS), la mejor óptica standard jamás construída en cualquier formato junto con el Summilux-M 50 mm f/1.4 ASPH. Al igual que el resto de objetivos para la S2, este excepcional objetivo ha demostrado que las ópticas del S-System constituyen un gran avance cualitativo de rendimiento óptico y mecánico en el segmento del formato medio.

Esta cámara destaca por una compacidad insólita en el ámbito del formato medio, con un peso de 1410 g (con la pila Leica de Litio-Ión 14429) y con unas dimensiones de 160 x 120 x 81 mm. Si comparamos ésto con dos excelentes cámaras profesionales réflex full frame 24 x 36 mm reflex como la Canon EOS 1 Ds Mark III (1385 g con la pila de Litio-Ión LP-E4 y dimensiones de 150 x 160 x 80) y la Nikon D3x (1340 g con pila de Litio-Ión EN-EL4A y dimensiones de 160 x 157 x 88 mm), está claro que la S2 es ligeramente más pequeña en tamaño que ambos buques insignias réflex de formato 24 x 36 mm, y su peso es muy ligeramente superior, apenas perceptaible en la práctica (25 gramos más que la Canon EOS 1 Ds Mark III y 70 gramos más que la Nikon D3x), faceta en absoluto baladí para una cámara de formato medio.

La empresa fotográfica alemana estima que la mejor calidad posible que puede obtenerse a partir de un archivo digital es un tema susceptible de interpretación, por lo que no ha producido un software específico, ya que es muy probable que la tecnología evolucione progresivamente en este aspecto. De este modo, aunque la caja de la S2 incluye Lightroom (que la mayoría de profesionales considera que es hoy por hoy el software que consigue los mejores resultados con flujos de trabajo altamente productivos), existen muchas otras opciones gracias al enfoque muy abierto de Leica por lo que respecta al formato de archivo (rasgo que es compartido por la M9 y la X1, que también almacenan las imágenes en un formato de archivo público y ampliamente apoyado), lo cual permitirá el acceso integral a futuras mejoras en este campo.


Por otra parte, en el ámbito de las sesiones fotográficas con la cámara conectada al ordenador, la Leica S2 es pionera en incorporar en su diseño, por vez primera en una cámara de formato medio digital, la tecnología de conector LEMO push-pull para su interface USB, lo cual potencia en gran medida las opciones de uso del modo tethering de alta velocidad. Esta tecnología muy avanzada permite además a los fotógrafos profesionales moverse fácilmente sin preocuparse de que el cable pueda desconectarse de la cámara, y al mismo tiempo, el sellado LEMO USB hace posible fotografiar con la S2 conectada al ordenador portátil incluso bajo las condiciones climáticas más adversas.

Y si añadimos a ello que la más reciente actualización de firmware FW 1.0.0.24 permite una compresión DNG sin pérdida de calidad de 75MB a 40MB, incrementando la tasa de disparo en ráfaga hasta las 14 exposiciones consecutivas a 1.5 frames por segundo, lo cual genera tanto mayor velocidad en la grabación de archivos como tiempos de transferencia más cortos al fotografiar en modo tethering (con la cámara conectada a un ordenador portátil), las ventajas de este tipo de hacer fotografías con la S2 son evidentes para aquellos fotógrafos profesionales que lo necesiten para sacar adelante sus trabajos con la mayor presteza y calidad posible. Igualmente, esta actualización de firmware mejora las funciones de cámara existentes, por ejemplo en el display del histograma en modo de revisión automática de imágenes (cuyo tamaño ha sido aumentado para optimizar la legibilidad) y en la expansión de la compatibilidad con diferentes tarjetas de memoria, siendo posible en la actualidad incluir modelos de 64 GB UDMA6, además de ofrecer opciones adicionales de configuración para el botón de memoria AF/AE.

Esta actualización de firmware FW 1.0.0.24 permite también un tiempo máximo de exposición de 125 segundos, velocidad de obturación en modo Bulb (la rueda selectora puede ahora utilizarse para elegir directamente las velocidades de obturación) y una nueva posibilidad de ajuste que avisa al fotógrafo sobre los niveles de altas luces y sombras. De este modo, la S2 constituye también una opción interesante para la fotografía nocturna y todo tipo de trabajos que precisen largas exposiciones con ausencia total de trepidación, especialmente con el nuevo cable disparador Modelo 16012 y la posibilidad de utilizar la función de cierre de espejo.

La S2 incluye además salida de video HDMI y conexión de sincronización de flash, así como tres modos de exposición: medición multizona de 5 campos, promedio con preponderancia central y puntual (3.5 %) y cuatro modos de control de exposición: Program, Prioridad a la Velocidad, Prioridad a la Abertura y Manual.

Y la versión más actualizada del software Image Shuttle para la Leica S2 permite Quick View permite visionar las imágenes en una ventana separada y escalable justo después de la captura cuando se fotografía en modo tethering (es decir, con la cámara conectada a un ordenador portátil), además de optimizar la compatibilidad con el actual firmware de la S2 y mejorar la estabilidad.

Por tanto, el uso de formato de archivo DNG potencia en gran medida fotografiar en modo tethering, con la Leica S2 conectada a un ordenador portátil o Apple McIntosh de estudio que incorpore Adobe Lightroom, y con el software Image Shuttle, las fotos aparecen en la ventana de Lightroom aproximadamente dos segundos después de la toma, por lo que este software propio de Leica permite un completo control de la cámara desde el teclado del ordenador.


Las raíces de Leica se hallan bien cimentadas en una historia de casi 100 años fabricando productos fotográficos de gran calidad desde la época dorada de Ernst Leitz Optische Werke en Wetzlar, que se inició en 1923 cuando Ernst Leitz II decidió seguir el consejo de Oskar Barnack y construir una cámara formato 24 x 36 mm con aspect ratio 2:3, de tal modo que la Leica I (Model A) fue presentada en la Feria de Primavera de Leipzig en 1925, y continuó durante muchas décadas con la subsiguiente fabricación de gran cantidad de cámaras telemétricas y objetivos con montura de rosca como la Leica II (D) 1932-1948, Leica III (Model F 1933-1939), Leica III F (1950-1959), Leica III G (1957-1960), hasta llegar al año 1954, que supuso un nuevo punto de inflexión en la historia de Leica, con el lanzamiento al mercado de la M3 (1954-1966) y el ulterior desarrollo del Sistema M, con cámaras telemétricas con montura de bayoneta M como la Leica M2 (1958-1967), M4 (1967-1975), M4-P (1984-1986), y los más modernos analógicos modelos de gama alta Leica M6 (con sus diferentes variedades y magnificaciones realizadas entre 1984 y 1998), M7 (2002) y Mp (2003).

Ochenta y siete años después, con el Dr. Andreas Kaufmann y ACM al timón, la Leica M9 digital full frame y la entrada por la puerta grande de Leica en el segmento del formato medio con la Leica S2 y sus ópticas que han redefinido la fotografía réflex y la calidad de imagen con cámaras dslr de formato medio disparando a pulso, han significado un nuevo momento decisivo en el devenir de la empresa alemana. Photo: José Manuel Serrano Esparza


Max Berek, Walter Mandler, Helmut Marx, Paul Sindel, Lothar Köelsch, Jan Schroeder, Sigrun Kammans, Michael Heiden, Ian Neil, Peter Karbe ........... Desde su más temprana existencia, la trayectoria de Leica como empresa fotográfica ha estado siempre repleta de diseñadores ópticos de talla mundial, una tradición que ha continuado hasta la actualidad y que está muy presente en todos los trabajadores de Leica Camera AG. Photo: José Manuel Serrano Esparza

La labor ha sido agotadora, asumiendo además riesgos con cuantiosas inversiones económicas en los dos proyectos anteriormente mencionados, pero con la confianza de que Leica estaría plenamente a la altura del formidable reto, gracias al trabajo hasta la extenuación e ilusión de grandes profesionales como Peter Karbe (Director del Departamento Óptico de Leica Camera AG), Stefan Daniel (Jefe de Producto del Sistema Leica M y Director de la División de Productos de Leica Camera AG), Stephan Schulz (Director de Producto del S-System), Christian Erhardt (Vicepresidente de la División Fotográfica de Marketing de Leica Camera USA), Justin Stailey (Especialista de Producto de la Sección Fotográfica de Leica Camera USA), Dr. Martin Picherer (Vicepresidente de la Junta Directiva de Leica Camera AG), Dr. Wolf Schumaker (Presidente del Consejo de Administración de Leica Camera AG), Andreas Lobejager (Miembro del Consejo de Administración de Leica Camera AG, que ha desarrollado desde 2007 una excelente labor en el ámbito financiero, tecnológico, de recursos humanos y de análisis de riesgos de mercado), Dieter Maier (Vicepresidente del Consejo de Administración de Leica Camera AG), Patrick Thomas (Vicepresidente del Consejo de Administración de Leica Camera AG), Edgar Zimmermann y Rita Woschée (Directores y Representantes de los Trabajadores en el Consejo de Administración de Leica Camera AG), Frank Holzer, Andreas Lobejager, sin olvidar por supuesto a los dos CEOS que han estado al mando de Leica durante los dos últimos años: Rudolf Spiller (con el que Leica comenzó su despegue económico) y el actual CEO desde agosto de 2010 Dr. Alfred Schopf, con el cual se han superado las mejores expectativas en cuanto a beneficios.

Stefan Daniel, Jefe de Producto del Sistema Leica M y Director de Administración de Productos de Leica Camera AG. Lleva 26 años trabajando con la empresa fotográfica alemana, habiendo iniciado su carrera profesional en 1985 como aprendiz en taller cuando tenía tan sólo 16 años de edad. Hombre con tremendos conocimientos técnicos y experiencia, ha sido artífice de muchas cámaras Leica M, tanto analógicas como digitales. Su talento, experiencia y capacidad de trabajo permitieron la la creación de las primeras cámaras Leica M digitales, la M8 y M8.2, hasta que finalmente fue viable lograr un sueño hecho realidad: La Leica M9 full frame digital, aparecida en Septiembre de 2009 y que se consideraba técnicamente imposible de fabricar, mediante el desarrollo de un sensor de altas prestaciones Kodak KAF-18500 CCD de 18 megapixels, sin factor de recorte, con tamaño 24 x 36 mm y con una configuración más apropiada de las microlentes del sensor hacia sus extremos, a fin de optimizar el rendimiento óptico en los bordes de la imagen, junto con una cubierta de sensor dotada de un filtro mejorado de luz infrarroja, de tal manera que ya no se precisan filtros IR montados en el objetivo, por lo que desde ese momento ha sido factible una perfecta sinergia entre la Leica M9 y una muy amplia gama de objetivos fabricados desde 1954 hasta la actualidad, gracias al uso de cada longitud focal tal cual, sin factor de recorte, que puede llevarse a cabo mediante la codificación de 6-bit que corrige tanto el viñeteado como la tendencia al cyan, además de un muy interesante sistema de selección manual de ópticas introducido por Leica en la M9 (no existía en la M8 y M8.2) y constituido por un total de 36 objetivos diferentes, cuyo número de modelo, máxima abertura de diafragma y longitud focal son identificados individualmente por un firmware interno. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Stefan Daniel mostrando la primera Leica S2, otro sueño hecho realidad: el diseño de una cámara réflex digital de formato medio optimizada para tiros a pulso, acoplada a las mejores ópticas de formato medio jamás fabricadas y logrando una calidad de imagen que hasta ahora pertenecía en exclusiva al ámbito de las cámaras analógicas de gran formato 8 x 10 (20 x 25 cm) con película de baja sensibilidad y cuyos negativos expuestos son digitalizados con scanner profesional de tambor. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Christian Erhardt, Vice Presidente de la División Fotográfica de Marketing de Leica Camera USA. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Justin Stailey, Especialista de Producto de la Sección Fotográfica de Leica Camera USA. Photo: José Manuel Serrano Esparza

Los seis años de ímprobo esfuerzo entre Febrero de 2005 -cuando Andreas Kaufmann llegó a Leica- y comienzos del 2011, han merecido totalmente la pena.

© Texto y Fotos: José Manuel Serrano Esparza. LHSA